Un discreto entretenimiento que resulta un grandes éxitos de otras cintas destinadas al publico infantil y adolescente.
A los siete años, Iván Dragó participa en el concurso de invención de juegos auspiciado por La Compañía de los Juegos Profundos, del que resulta ganador. El único detalle fuera de lo común es que no se anuncia cuál es el premio. Lo que sí sabe es que a partir de ese momento empezarán a sucederle las cosas más extrañas: un viaje en globo de impredecibles consecuencias, un colegio que se hunde en la tierra, una niña invisible, un laberinto que esconde pesadillas... Se abrirá para él un mundo de aventuras y misterios en el que nada le resultará fácil y donde cada paso, lo mismo que en un tablero, será un desafío.
El juego de tu vida
El Inventor de Juegos es un libro publicado en el año 2003 por el autor Pablo de Santis. 11 años después de su primera edición nos llega la película, una co-producción entre Argentina, Canadá e Italia que contó con un presupuesto cercano a lo $6 millones de dolares. Me saco el sombrero ante los diseñadores de producción y otros responsables de áreas claves, ya que el film nada tiene que envidiarle a Hollywood y sus super-producciones que buscan atraer al mismo público pero con una cantidad de dinero que fácilmente (y como mínimo) quintuplica la previamente mencionada.
Sin lugar a dudas este es el punto mas fuerte de El Inventor de Juegos, ya que se ve y se escucha como pocas cosas lo han hecho dentro del cine nacional. Si bien muchos de los actores involucrados son del exterior, detrás de cámara hay una gran cantidad de talento argentino que da prueba una vez mas que aquí también podemos hacerlo.
Desgraciadamente, El Inventor de Juegos también parece buscar en producciones extranjeras algo de inspiración. Es inevitable trazar paralelismos entre Iván Drago y Harry Potter, no solo como personajes si no que también a nivel historia: Desaparición de los padres, una escuela particular, la aparición de una figura paterna, un villano que es total opuesto de nuestro héroe. Aunque muchas de estas cosas son "gajes del oficio", la forma en que decidieron presentarlas invita a la comparación.
Nuestro pequeño héroe Iván Drago (no, nada que ver con el boxeador soviético de Rocky IV) está interpretado por David Mazouz, a quien quizás recuerden de la serie de poca duración Touch, con Kiefer Sutherland. Mazouz tiene la suficiente habilidad y carisma para llevar adelante la película al igual que su co-protagonista Megan Charpentier (la temible niñita de Mama). Ambos están bien acompañados por un elenco de figuras nacionales e internacionales entre los que se destacan Edward Asner (la voz de Carl en Up!), nuestro querido y todo terreno Alejandro Awada y Joseph "Hermano de Lord Voldemort" Finnes, quien interpreta a una suerte de Willy Wonka de la industria del juguete.
La película obviamente está destinada a un público en particular pero tiene los suficientes elementos como para que cualquiera pueda identificarse y disfrutarla mas allá de la edad. La dirección de Juan Pablo Buscarini (Condor Crux, El Arca, El Ratón Pérez) es por demás de correcta, aunque el guión por momentos se siente que depende mucho del dialogo.
Conclusión
Incluso a casi dos semanas de haber visto la película, todavía no estoy en condiciones de afirmar si realmente me gustó o no. De lo que sí estoy seguro es que los mas pequeños y/o seguidores del libro (del cual tengo entendido que es una adaptación bastante fiel) la van a disfrutar. En lo personal, me resultó por momentos aburrida y que se queda a mitad de camino cuando pretende emocionar e impresionar. Y si bien es una co-producción y el 3D no aporta demasiado, hay un gran trabajo de producción como pocas veces se vio en el cine argentino.