“El Irlandés” está basada en hechos reales que rodean la escena política y social norteamericana a lo largo de las décadas del ’50, ’60 y ’70. Más precisamente, ahonda en la figura de Frank Sheeran, un veterano de la Segunda Guerra Mundial, estafador y sicario que fue apadrinado por Russell Bufalino, una figura importante dentro del crimen organizado. Es así como le presenta al sindicalista Jimmy Hoffa y se convertirá en su mano derecha.
Martin Scorsese vuelve al cine para ofrecernos tres horas y media de pura cinefilia, donde trata nuevamente algunos de sus temas clásicos como la mafia, junto a sus actores fetiches y una narrativa que no da un minuto de respiro.
En “El Irlandés” todo está perfectamente articulado: a pesar de su duración, la historia es atrapante y está contada con un ritmo dinámico. En ella confluye el suspenso, el drama y algunos momentos de humor.
Esto es posible también gracias al maravilloso elenco que conforma el film: Robert De Niro nos brinda una de sus mejores interpretaciones, con matices que van desde la violencia hasta el arrepentimiento. Al Pacino lo acompaña con una actuación imponente y una magnífica presencia en pantalla. Además, tenemos el enorme placer de ver a estas reconocidas figuras trabajando juntas una vez más pero de la mejor manera. Y también podemos destacar la labor de Joe Pesci, un actor que nos demuestra su gran versatilidad.
Tampoco podemos dejar de lado los aspectos técnicos, con una atinada recreación de época, una bella fotografía y unos efectos visuales que permiten recorrer la vida de los protagonistas a través del tiempo.
Todos estos elementos nos demuestran una vez más la pericia que tiene Martin Scorsese como autor, ya que si bien vuelve a tratar algunos temas vistos previamente le agrega su experiencia y madurez para convertir este film en una obra maestra.