Cierre perfecto e impecable comienzo
Tras la pobre repercusión de la sexta entrega de esta saga, los productores pusieron toda la carne al asador para esta supuesta última parte, llena de personajes y con el atractivo especial de la experiencia en tres dimensiones.
En el año 2004 se estrenó El juego del miedo (Saw era el título en inglés) y el éxito de este original y potente film de terror provocó una serie, año tras año, que llega ahora a su séptima entrega, esta vez, con el extra de ser en 3D.
Cuando se hizo aquel primer film no existía el plan de generar esta saga que se ha convertido en la más exitosa de las series de films de terror. Su villano, Jigsaw (Tobin Bell), se volvió el más famoso del cine de terror del siglo XXI. Luego de la pobre recepción en taquilla de la sexta entrega de la serie, los productores anunciaron que este sería el capítulo final, y agregaron el interés extra de que sería en 3D. A las ya bastante impresionantes imágenes de los filmes anteriores, entonces, habrá que sumarle esa experiencia 3D.
El juego del miedo 7 hace todo lo que puede hacer una ¡séptima! parte. Tiene autoconciencia, relaciona las situaciones con los filmes anteriores, hace regresar más personajes que cualquiera de las otras secuelas, responde algunas preguntas pendientes y finalmente da un puntapié inicial a un desenlace que, increiblemente, es un cierre perfecto a la vez que un impecable nuevo comienzo. Otro mérito es construir una historia coherente y con sentido, utilizando una vez más el recurso de la acción en paralelo (dentro y fuera de los lugares con las trampas de Jigsaw). Aunque sin duda el film es muy fuerte y serán pocos o ninguno los que quieran sumarse por primera vez a la serie o al género a partir de este film, hay que decir que la trama se entiende y que el entretenimiento está asegurado. Se pasan volando los 90 minutos de película. Eso sí, las cuentas regresivas previas a cada activación de las tramas nos llevan al límite de la tolerancia. Los seguidores de la serie se sentirán muy a gusto con todas las novedades, y si acaso hubo un secreto férreo detrás del argumento de la película, es aconsejable que quienes la vean conserven en secreto la historia, para que todos puedan jugar, como corresponde, y seguramente no por última vez, el juego del miedo al que esta serie invita.