Rodada casi exclusivamente en exteriores, en bosques, estepas y montañas patagónicas, el nuevo film de Juan Dickinson nos ofrece una mezcla de géneros apreciable. Por un lado, desarrolla su argumento el costado intimista que refleja un drama familiar y, por otro, contraponiéndose, complementándolo, el elemento del thriller que activa la trama de modo más tradicional, e incide de modo accesorio, otorgándole fluidez y, asimismo, concientizándonos de cierta realidad social. La naturaleza guarda misterios en la austral Tierra del Fuego, y allí está el inhóspito clima, convirtiéndose en un protagonista más de la historia. Juan Dickinson, dividiéndose créditos de escritura junto a Fernando Musa, elige trabajar los recursos de modo clasicista, rodeándose de un gran elenco: Vanesa González, Osmar Nuñez, Lautaro Delgado y Jorge Sesán. Protagonistas de un film que transita atmósferas reconocibles al cine del director argentino, retrotrayéndonos a “Los Perros del Fin del Mundo”, recomendable documental estrenado en 2018. Aspecto no menor, imbrica transformaciones sociales, ocupándose en retratar la problemática de la mujer moderna. Sin embargo, peca de cierta falta de sutileza en la resolución de escenas claves.