Esta traslación de la novela homónima de Clarice Lispector (1920/1977) trata sobre una mujer que no puede manifestar sus sentimientos.
Su vida se reduce a su ocupación como maestra de primaria y los ocasionales encuentros sexuales, sin comprometerse, superficiales, que mas que completarla continúan vaciandola. Hasta que conoce a un argentino, profesor de filosofía, egocéntrico, megalómano, casi narcisista, pero que sin embargo algo diferente encuentra en cada encuentro aunque ella se proteja creyendo que solo sea para satisfacerse sexualmente.
Loreley (Simone Spoladore) es una mujer solitaria, con una presentación “misántropa” sobre el mundo de los adultos, vive en un departamento heredado de su madre recientemente fallecida. Su traslado a este inmueble en Rio de Janeiro, se debió mas a alejarse del sofocamiento que le provocaba vivir en una casta patriarcal, donde