A lo largo del año tuvimos varias estrenos relacionados con el mundo de la gastronomía que aprovecharon el actual auge de los reality shows culinarios en la televisión.
Dentro de esta temática El menú sobresale como la mejor producción de la temporada al ofrecer un gran entretenimiento que combina el thriller psicológico con la comedia de humor negro.
El film del cineasta inglés Mark Mylod desarrolla una sátira ácida y brutal sobre la comunidad snob de los cocineros pretenciosos y los críticos que los apañan y creen que la elaboración de un plato tiene el mismo valor artístico que una pintura de Van Gogh.
El relato de Mylod maneja de un modo impecable el tratamiento de la tensión y el suspenso que con el transcurso del tiempo deriva en un espectáculo turbio y morboso.
Lo ideal es llegar al visionado con la menor información posible sobre argumento ya que eso contribuye a que el conflicto y los diversos giros sorpresivos se aprecien con más intensidad.
El rol de Anya Taylor-Joy representa la mirada del espectador casual que ingresa al alocado mundo de la gastronomía pretenciosa que en esta propuesta tiene un retrato más grotesco.
La narración del director hace un gran trabajo a la hora de gestar un clima de tensión permanente que incrementa a medida que se desarrolla el rol del villano, a cargo de un extraordinario Ralph Fiennes.
El Chef Slowick es una especie de gemelo malvado y psicópata de Gordon Ramsay combinado con la mentalidad macabra del John Kramer de SAW y sobresale entre los mejores roles que encarnó el actor en los últimos años.
Si bien el reparto cuenta con muy buenas intervenciones de Nichola Hoult y Hohn Leguizamo, el duelo psicológico que se gesta entre los roles de Fiennes y Anya Taylor Joy brinda algunos de los mejores momentos de esta producción.
En el acto final durante el desarrollo del clímax la propuesta de Mylod se desinfla un poco, debido a un final que remite demasiado a un clásico del cine terror y una serie de incógnitas que la trama no llega a explicar.
Salvo por esos detalles EL menú ofrece un gran thriller que se disfruta muchísimo por la labor de los protagonistas el dominio del suspenso que presenta la dirección.