La voz es mi pincel
El método Tangalanga (sección Galas en el Festival de Mar del Plata) explora la vida del popular humorista argentino reconocido por ser el precursor de las bromas telefónicas, en el momento justo en el que pasa de ser Jorge Rizzi, un tímido empleado de una jabonera al que no le salían las palabras, a este monstruo verborrágico que insultaba a la gente sin vergüenza alguna a través del teléfono.
El enfoque cálido y simpático que eligió el director para contar esta historia es totalmente efectivo. La película se siente como un placentero recorrido, acompañado por una estética visual impecable y unos leit-motivs musicales que funcionan a la perfección. Con una historia amorosa detrás, el film oscila entre la comedia y el drama sin mucho problema, aunque sin dudas sus puntos flojos se encuentran en las secuencias más bien trágicas.
Piroyanski pareciera haber nacido para este papel -y encima interpreta dos personalidades opuestas-. Tan solo con su presencia realza el nivel de la película y provoca carcajadas en varias ocasiones. El resto del reparto acompaña bien, destacándose Julieta Zylberberg en un un rol adorable, Luis Machín como el jefe de Jorge y Silvio Soldán en un personaje memorable.
El método Tangalanga es una excelente recomendación para cualquiera que quiera pasar un buen rato en el cine y, de paso, conocer un poco más al reconocido humorista que dejó un enorme legado.
Puntuación: 7,5/10
Por Manuel Otero