Contra todo pronóstico, Mateo Bendesky construye un amoroso relato a partir de la figura del emblemático cómico que supo hacer de la puteada y las bromas telefónicas, por sorpresa, una manera de vivir.
¿Es esta película una historia de amistad? ¿Es una comedia romántica blanca? ¿Es un homenaje a este artista? Sí a todo lo anterior, además de potenciar la narración gracias a las excelentes actuaciones del trío protagónico, Martin Piroyansky, Julieta Zylberberg, Alan Sabbagh y una cuidada reconstrucción, no sólo de época, sino, principalmente, de una atmósfera específica que apuntala todo.