Nicolás (Juan Barberini) filosofo de profesión, regresa a un pueblo dentro del monte de Formosa para rescatar a Rafael (Gustavo Garzón), su padre, un medico reconocido quien se aisló de todo y aparentemente de todos, su carrera, su hogar, de forma intempestiva e inexplicable. Padre e hijo tratarán de recomponer la relación, en un primer momento Nicolás no puede comprender los actos de su progenitor. De forma progresiva