Los noruegos esperaban con ansiedad este estreno mundial. Era la primera vez en muchos años que toda una película de gran presupuesto era filmada en su territorio por completo. También, que se utilizaba un material literario escrito originalmente por uno de sus hijos pródigos, Jo Nesbøs. Este autor ha vendido más de 36 millones de copias de su trabajo, y ha sido traducido a más de 40 idiomas.
"Snømannen", la obra original en que está basada la peli es la séptima novela del detective emblema de Nesbøs.
Pero la magia de Hollywood todo lo puede. Así como hace poco con "Mitch Rapp" (se acuerdan de Vince Flynn y su trayecto de 15 libros sobre el personaje en que está basada "American Assassin" de reciente estreno?) los productores toman un camino discutible.
Se elige una obra (presumiblemente la mejor, dicen, aunque Harry Hole tiene 10 publicadas y son muy destacadas por la crítica) y sin analizar mucho que lo que le da sentido y forma a ese reconocimiento del público puede basarse en la paciente construcción del perfil de quien lleva adelante la historia, pretendiendo un suceso similar en la pantalla grande con una versión condensada y edulcorada del héroe en cuestión.
Bueno, no es así. Menos cuando en la sala de edición algo pasa con los que seleccionan el material. Por vaya a saber uno que razón, el talentoso director sueco Tomas Alfredson , a quien hasta este film no se le escapaba un fotograma de más en sus desarrollos, falla en el orquestado del desarrollo de este "Muñeco de nieve".
Alfredson viene de hacer las maravillosas "Let the right one in", y "Tinker Tailer Soldier Spy", por lo que es difícil creer que haya organizado tan pobremente el material recogido en Noruega.
Todo esto que conté es para explicar, desde mi visión, porqué "El muñeco de nieve", como producción cinematográfica, parece errática y desprovista de tensión. Sí, ofrece algunos segmentos "gore" y tiene un argumento que puede interesar, pero desconcierta durante la construcción de la trama, por tener lagunas sorprendentes en cuanto a secuencias y continuidades de personajes.
La historia, les decía, es una más de las del brillante detective Hole (Michael Fassbender). El es un hombre que tiene problemas en su vida personal (la paternidad, el alcohol y las relaciones con las mujeres encabezan el ránking), pero en lo suyo, es de lo mejor de Noruega. Aquí es convocado para resolver un crímen macabro, del que pronto descubrirá que es sólo un eslabón de una cadena más larga.
Hasta incluso podría encubrir a un poderoso asesino serial de tradición en la región. Hole, no trabajará solo, sino que hará tándem con Katrine (Rebecca Ferguson) para la resolución del caso, pero como se imaginarán, la atracción mutua de sus perfiles llevará también a escenarios de mayor intriga en el devenir de los hechos.
"El muñeco de nieve" está plagada de secundarios que no alcanzamos a entender, ya sea porque son de breve aparición o porque sus aportes son inexistentes para lo que nos interesa : la resolución de los crímenes.
En definitiva, esta es una de esas cintas que deben haber sido testeadas ante espectadores antes de su llegada a salas, y los resultados no fueron los deseados.
En consecuencia, algo podría haber pasado porque no la siento una película plena de Aldredson, más allá de la belleza con la que sigue los paisajes nórdicos y cierta sensación de intriga que la historia respira. Falta tensión y profunidad en los personajes, a pesar del denonado trabajo de Fassbender por llevar adelante su perfil.
Está lejos de lo esperado y es probable que si están atentos, descubran algunas inconsistencias en el universo narrativo, no esperables para una producción de este tipo.