Fue un éxito en Francia y nació como obra de teatro (actualmente en cartel en Buenos Aires) y eso se nota. Una reunión familiar, dos hermanos, sus esposas y un amigo de siempre. Un tema, el nombre del futuro bebé de una pareja, dispara la bomba y salen a la luz los secretos y rencores, prejuicios y odios que se mantuvieron bajo la alfombra. Buenos actores, que ejercen una puntiaguda esgrima verbal, por momentos, agobiante.