Con una fuerte inspiración en el cine negro, El Paraíso es la nueva película animada argentina que muestra en primera persona una red de prostíbulos que operaba en la ciudad de Rosario.
El filme abre con la anciana Magdalena (Norma Aleandro), comienza a narrar la historia de su vida a un periodista (Ernesto Larresse), en presencia de su hijo. Basada en la serie animada “Tierra de rufianes”, se centra en la historia de Magdalena y Ana, dos hermanas que viajan de Polonia a Rosario en el año 1926, traídas con la promesa de trabajo, matrimonio y futuro promisorio. Dando cuenta que fueron engañadas junto a otras mujeres apenas bajan del barco y
Basada en la serie “Tierra de Rufianes”, llega el estreno de un ambicioso proyecto que marca un nuevo precedente en la historia de la producción animada argentina. Bajo la dirección de Fernando Sirianni y Federico Breser -director de la serie-, “El Paraíso” cuenta una trágica historia de amor, traición y venganza que toma inspiración en hechos ocurridos en la convulsionada Rosario durante los años veinte, ciudad apropiada por la violencia de las mafias y sus turbulentos negocios ligados al tráfico y explotación de mujeres. Por medio del enorme desafío de narrar un drama bajo el formato de animación 3D, y con una clara influencia narrativa y estética del género film noir, la película consigue construir, con una cierta base histórica, la oscuridad y perversión que hay dentro del negocio de la prostitución. Contado desde el presente y a partir de sus dolorosos recuerdos, Magdalena Scilko se convierte en un testigo clave al comenzar la investigación del triple crimen de los Abramov, una organización familiar-criminal que manejaron durante décadas la red de prostitución más grande de Rosario. Magdalena le relatará al periodista investigador cómo ella y su hermana Anna arriban a la ciudad portuaria desde Polonia con la promesa de un mejor futuro, cómo se vuelven víctimas del negocio explotador de los Abramov, y cómo, dentro de ese contexto desgarrador, nace su historia de amor con Ian Abramov. De impronta violenta, la película logra obtener, aún con los recursos tecnológicos limitados pero usados de forma inteligente, una interesante estética visual (mejor lograda en las instancias monocromáticas), y consigue construir un clima de suspenso y de drama muy propio del género. “El Paraíso” es la primera película argentina en ser realizada íntegramente con Unreal Engine, y cuenta además con las increíbles voces de Norma Aleandro, Nicolás Furtado, Maite Lanata, Alejandro Awada, Jorge Marrale, Mariano Chiesa, Cesar Bordón y Ernesto Larrese; y con la participación especial de Elena Roger, Favio Posca y Juana Viale.
Rosario, 1926. Las hermanas Magdalena y Anna Scilko llegan a Rosario desde Polonia con la promesa de un futuro lleno de oportunidades. A poco de desembarcar descubrirán que todo ha sido un engaño y de inmediato pasarán a integrar una red de trata y prostitución dominada por los Abramov. Basada en la serie animada Tierra de rufianes, que a su vez estaba inspirada en los tiempos de la Varsovia / Zwi Migdal en la “Chicago Argentina”, la ópera prima de Fernando Sirianni y Federico Breser tiene en principio una estructura propia de un documental: un periodista (Ernesto Larresse) llega a la casa de Magdalena Scilko (la voz de Norma Aleandro), una mujer que en 2000, a los 91 años, finalmente acepta contar su desgarradora y épica historia. El periodista en cuestión escucha la grabación de un noticiero de la época en que se produjo el triple crimen de León Abramov (Jorge Marrale), su hijo Aaron (Mariano Chiesa) y su sobrino Ian (Nicolas Furtado), quienes durante décadas dominaron el negocio del narcotráfico, el contrabando y la prostitución en Rosario. Y ambos hechos se irán conectando con el correr de los minutos. Magdalena, claro, fue una de las víctimas de ese submundo, pero también protagonista a partir de su historia de amor (inevitablemente trágico) con Ian. Del relato en ese presente del año 2000 viajaremos a esa convulsionada década de 1920 con la joven Magdalena ahora interpretada desde la voz de Maite Lanata. Construido en esos flashbacks como un film noir bastante clásico con gangsters hiperviolentos, El Paraíso tiene unos cuantos climas logrados y valiosas ideas visuales, aunque por momentos la animación luce por momentos un poco "robótica", sin alcanzar la fluidez y naturalidad que seguramente se podría haber conseguido si se hubiese contado con un presupuesto más holgado. Además de los actores y actrices mencionados, se escuchan las voces en papeles secundarios de otras figuras como Alejandro Awada, César Bordón, Elena Roger, Favio Posca, Juana Viale, Claudio Da Passano, Carlos Kaspar y Marcos Woinsky. Aportes quizás menores en cuanto a minutos en pantalla, pero muy valiosos para un film que aborda los excesos, abusos y miserias del crimen organizado con las mujeres como víctimas principales.
En su imperdible documental sobre el cine de su país, A Personal Journey with Martin Scorsese Through American Movies (1995), Martin Scorsese define los tres géneros que considera autóctonos, provenientes de las mismas entrañas de Hollywood: el western, surgido de la frontera; el musical, de Broadway; y el cine de gángsters, de la expansión del crimen organizado a comienzos del siglo XX. Si bien no fue patrimonio exclusivo de aquellos tiempos y aquellas urbes pujantes la gestación de estructuras criminales jerárquicas y expandidas, sí lo fue de ese cine joven que gestó su iconografía e imaginario para luego exportarlos a otros territorios y otros tiempos. Nacida de las calles y de la crónica policial, la vida criminal de Rosario a mediados de los años 20 del siglo XX tuvo como protagonistas a los Abramov, una familia que condujo a fuego y sangre el negocio de la trata de personas y esclavizó a centenares de mujeres inmigrantes en los prostíbulos que llevaban bautismos tan irónicos como “El paraíso”. La película de animación dirigida por Fernado Sirianni y Federico Breser recoge aquella historia, y lo hace en clave de animación, inspirada en la serie Tierra de rufianes (creada en 2017 por el mismo Breser), y situada en el corazón de aquella ciudad santafesina disputada por clanes y negocios. Las coordenadas son tanto las del cine de gángsters, con sus mafiosos de boina y cigarrillo, los burdeles y las canciones en francés, las calles húmedas y el sonido de las ametralladoras, como las del cine negro, con sus tiroteos a contraluz, el periodista como improvisado investigador, los secretos como la llave para la revelación. Sirianni y Breser condensan esa iconografía como carnadura de una historia de amor, la que unió a Ian Abramov y Magdalena Schilko, la misma que puso en jaque aquel imperio del crimen. El trabajo de animación logra una minuciosa reconstrucción de ese imaginario, nítido y preciso, como en fotografías en movimiento. Lo que nunca logra la película, pese a su impronta adulta y violenta, a su acercamiento carnal a aquellos conflictos morales, es imponer su mirada sobre ese artificio, que siempre resuena a un paraguas externo que cobija una fábula autóctona. La historia evoca en su estructura a centenares de películas de gángsters, en sus ideas de montaje a recursos icónicos como la alternancia operística de El padrino de Coppola, en su fresco prostibulario más al jazz y la chanson que al arrabal portuario. Pero pese a ese aire de importación y a cierto maniqueísmo del relato, El paraíso exuda un genuino amor por el género, un comprometido trabajo en la memoria de aquella tragedia. Desde el presente del 2000 y guiado por el recuerdo de Magdalena, ya anciana en Buenos Aires, el retrato de “La Varsovia” de los Abramov, sus disputas con los rusos, sus pecados y traiciones, adquiere el estilo plástico de un tiempo olvidado, de un sueño maldito, de un lienzo bañado de luz y sangre. Ese distanciamiento es el que mejor sienta a la mirada de Sirianni y Breser, más esquivo al registro histórico y más cercano a esa fantasía cinéfila de dibujos y sombreados.
El Paraíso tiene es una atrapante historia de mafias «argentas» contada en forma de policial negro: poniendo la animación al servicio de mostrar el lado más oscuro y perverso de quienes estaban detrás de este negocio
La ópera prima de Fernando Sirianni y Federico Breser es un largometraje de animación 3D para adultos, basado en la serie “Tierra de rufianes” y con una estética inspirada en el género film noir. Cuenta con las exquisitas voces de Norma Aleandro, Nicolás Furtado, Maite Lanata y Jorge Marrale regenteando este thriller ambientado en los años ’20 de la ciudad de Rosario.“El paraíso” es una película de animación 3D para adultos, algo poco común en la cinematografía argentina, con rasgos estéticos del cine negro y basada en la espectacular serie animada “Tierra de rufianes” (2015). Creada por Fernando Sirianni y Federico Breser, “El paraíso” comienza con una estructura de documental: un periodista (Ernesto Larresse) va hasta la casa de Magdalena Scilko (la voz de Norma Aleandro) para entrevistarla. Ella es una mujer de unos 90 años que acepta narrar la desgarradora historia de amor trágico, prostitución, poder y muerte que la tuvo como protagonista, con la única intención de develarse a su hijo qué pasó verdaderamente con su padre Ian Abramov con quien tuvo un romance inevitablemente marcado por la tragedia. El relato narrado por la mujer anciana traslada al espectador hacia la ciudad de Rosario en el año 1926, cuando de muy jovencita Magdalena Scilko (Maite Lanata) junto a su hermana Anna llegaron desde Polonia con el sueño de un futuro mejor. Sin embargo, ambas fueron engañadas y capturadas por una una red de trata que manejaban los Abramov y que terminó con el triple crimen de quienes dominaban el negocio del narcotráfico, el contrabando y la prostitución en la región.
Film noir animado made in Argentina A través de la animación, y ambientada en la Rosario de los años 20, "El paraíso" (2022) nos regala un retrato violento y sorprendente de la “Chicago Argentina”. Dirigido por Fernando Sirianni y Federico Breser, este thriller se centra en dos jóvenes polacas que llegan a Rosario en búsqueda de un futuro mejor. Allí conocerán a “Los Abramov”, una agrupación de criminales que, entre otras cosas, controlaban la red de prostitución de la ciudad. Una historia de amor, engaños y traiciones que funciona como una mirada testimonial de la época. A través de las voces de grandes intérpretes como Norma Aleandro, Nicolas Furtado, Maite Lanata, Jorge Marrale y Alejandro Awada, el film se posiciona como uno de los mejores proyectos argentinos animados del año. En blanco y negro, con tonos y colores seleccionados para resaltar distintas escenas, el largometraje es una experiencia que generará admiración para todos los amantes del cine negro. Basada en la serie Tierra de Rufianes, la película es un logro, tanto desde el punto de vista estético como de la construcción de la historia. La animación en 3D está bien concebida aunque no es del todo eficiente debido a los movimientos poco naturales de cada personaje. En cuanto a la narración, la pausa y los silencios son factores claves para ir desarrollando el relato a fuego lento. Si bien El Paraíso es la ópera prima de los directores, ambos son dos referentes de la industria argentina del cine animado y eso se hace evidente en varias decisiones de la obra. Sosteniéndose como una especie de documental, en donde un periodista llega a la casa de una señora mayor para presenciar el testimonio de una historia única, el film utiliza flashbacks para la descripción de un relato plagado de gangsters, tiros y pasión. Homenajeando al cine noir, esta obra respeta lo clásico y nos brinda suficientes momentos visuales para que disfrutemos en la gran pantalla.
Llega a los cines el próximo 8 de septiembre El paraíso, película de animación para adultos basada en la serie de ocho capítulos «Tierra de Rufianes» (2016), disponible en apple T.V. En el filme se relata la historia Magdalena y Anna Scilko, dos jóvenes polacas que son capturadas por la familia Abramov y obligadas a ser explotadas sexualmente en la red de prostitución que estos manejaban en Rosario a principios del siglo pasado. Magdalena conoce en el prostíbulo a Ian Abramov, con el cual comienza una historia de amor teñida de oscuridad, venganza y muerte. Uno de los grandes desafíos de este tipo de películas es que capten a la audiencia a la cual están destinadas: es una película que por la densidad de su historia y el contenido de la misma está dirigida para adultos de principio a fin. El paraíso cómo ficción crea los climas que se propone: una historia cargada de suspenso, venganza, amor, sufrimiento y pérdidas. Las voces de reconocidos actores van de la mano con los distintos personajes del filme. Por otro lado resulta interesante apreciar la película cómo retrato de una época oscura de la «Chicago Argentina». Con flashbacks y flashforwards como recurso principal para estructurar el relato, Sirianni y Breser como directores llevaron adelante una tarea titánica: editar una película animada y en blanco y negro es un desafío para el cine argentino, que no tiene tanta trayectoria en este género. Las comparaciones no abundan en el ámbito nacional, pues la animación para adultos no es para nada común en la cinematografía argentina. El paraíso es una particular y sólida propuesta para disfrutar en la pantalla grande
Es bastante corriente escuchar hablar de Rosario como “la Chicago Argentina”. Una expresión popular, que se repite de manera constante aunque no siempre se recuerda su origen. Ese apodo, no muy turístico, hace referencia a las actividades criminales que habían tomado como centro a la ciudad santafesina en las décadas del 20 y 30. La comparación con la Chicago de Al Capone o Frank Nitti, popularizada en Hollywood con films como Little Caesar (1931) y Scarface (1932), tenía su contrapartida local en personajes como “Chicho Grande” y «Chicho Chico”. Sus negocios incluían secuestros extorsivos, contrabando y trata de mujeres, actividad que por aquel entonces era conocida como Rufianismo, y cuya red más conocida fue la tristemente célebre Zwi Migdal. Estos acontecimientos también fueron fuente de inspiración para el cine argentino, en películas como La Maffia (1972), de Leopoldo Torre Nilsson, o recientemente el documental Maka, una chica de la Zwi Migdal (2014). Y son también la inspiración de El Paraíso. Estos acontecimientos forman parte del contexto histórico en el que se desarrolla la historia del film de Fernando Sirianni y Federico Breser. Y en algunos casos son citados explícitamente, como los mencionados Chicho Grande y Chicho Chico, la Zwi Migdal, y también el personaje que de algún modo acabó con aquella: Raquel Liberman, quien después de pasar años como prisionera de esa red de prostitución, logro escapar y dar un testimonio que sería fatal para la organización. Liberman ocupa de hecho un lugar lateral en la trama pero no sin importancia, y su historia sirvió también como inspiración a la historia ficcional de los personajes principales. La protagonista principal es Magdalena Scilko (en la voz de Maite Lanata), quien junto con su hermana llegan en 1926 de Polonia a Rosario, para ser caer en manos de una organización de trata regentada por los Abramov, una familia que maneja varios emprendimientos criminales, entre ellos la red de prostitución más grande la ciudad. Separada de su hermana, Magdalena va entablar una relación amorosa con Ian Abramov (Nicolas Furtado), es decir, uno de sus captores, y, a la vez, se pondrá en contacto con ella Roco Falcao (Alejandro Awada), un periodista interesado en hacer públicas las actividades de la organización. El Paraíso se presenta como el primer largometraje nacional de animación para adultos. El film está basado en “Tierra de rufianes”, una serie de animación 2D dirigida por el propio Breser. Para esta ocasión, Sirianni, autor del guion, hace tándem con aquel en la dirección y llevan la historia a la animación 3D. El resultado es visualmente impactante, sobre todo en lo que hace a escenarios, reconstrucción de época, y en su imagen hiperrealista filtrada a través de una iluminación expresionista. Un hiperrealismo que se aliviana con el diseño de personajes, cuya presentación y movimientos recuerdan al mundo de los videojuegos. El contexto en que se desarrolla la historia es histórico y realista pero los referentes narrativos son claramente cinematográficos. Por un lado el cine de gangsters del Hollywood de los 30 y por otro el Film Noir que en este caso predomina tanto en la estética de claroscuros, donde el blanco y negro es fundamental, en la atmósfera pesada, en el retrato de una sociedad corrompida, en los personajes moralmente ambiguos (el caso de Ian Abramov es el ejemplo más evidente) y en el fatalismo que sobrevuela todo el relato. La película arranca de una manera simil documental, cuando Magdalena ya anciana (con la voz de Norma Aleandro) le relata a un periodista en la actualidad aquellos acontecimientos de hace casi un siglo. Únicos momentos en color que se van intercalando con el blanco y negro del retorno al pasado. Pero a pesar de este inicio, la propuesta claramente se aleja del realismo para abrazar el imaginario de los films que son su referencia, y a los cuales los realizadores claramente quieren rendir culto. Es así como se entienden situaciones que pueden parecer forzadas o diálogos que de otro modo suenan afectados o impostados pero que encajan dentro del artificio cinematográfico que reproducen. Una propuesta que es moderna en su formato y clásica en su forma. EL PARAÍSO El Paraíso. Argentina. 2022 Dirección: Fernando Sirianni, Federico Breser. Con las voces de: Norma Aleandro, Nicolas Furtado, Maite Lanata, Jorge Marrale, Alejandro Awada, Cesar Bordon, Mariano Chiesa. Guión: Fernando Sirianni. Música: Santiago Walsh. Dirección de Arte: Federico Moreno Breser. Montaje: Dante Mártinez, Fernando Sirianni. Duración: 103 min
El paraíso es una película de animación para adultos que transcurre en la década del veinte en Rosario. Es la historia de Magdalena y Anna Scilko, hermanas inmigrantes que llegan de Polonia a la Argentina con la esperanza de un nuevo futuro. Mezcla de cine de gángsters y film noir, la película muestra la criminal de Rosario de aquellos años, teniendo como eje a los Abramov, una familia que condujo de forma sangrienta el negocio de la trata de personas y esclavizó a centenares de mujeres inmigrantes en los prostíbulos locales, entre ellos El paraíso. El guión de Fernando Sirianni, también codirector, es particularmente bueno, mostrando un conocimiento de los géneros cinematográficos y una estructura dramática impecable. Está muy bien la historia, de punta a punta. La película se basa en la serie web Historia de rufianes, de ocho episodios de once minutos, creada y dirigida por Federico Moreno Breser, aquí también codirector. También se perciben ecos del libro de Héctor Nicolás Zinni, Prostitución y rufianismo. Tanto la serie como la película se construyen al estilo de una novela gráfica, siendo mejor la película estéticamente a pesar de tener ciertas limitaciones técnicas. El trabajo de voces es bastante bueno, destacándose particularmente lo que hace Jorge Marrale, más aprovechado que nunca con su gran voz. La historia está filmada mayormente en blanco y negro, ya que son las que transcurren en la década del veinte la que usan ese recurso. En el presente el color también es bien utilizado, aunque por razones obvias sin la estética noir mencionada. La banda de sonido, además, es de lo mejor de estos años también. Una rareza del cine argentino que vale la pena destacar.
Los directores Fernando Siriani y Federico Breser se atrevieron a hacer un tema particularmente serio y vergonzante de nuestra historia. En Rosario, una familia mafiosa se dedica a la “importación” de chicas polacas, corridas por el hambre en el continente europeo, que llegan ilusionadas con un matrimonio por conveniencia y terminan en una horrorosa red de prostitución. La historia de la Zwi Migdal y su poderío fue desafiada por valientes mujeres que lucharon contra esa mafia. El argumento basado en historias reales cuenta el devenir de dos hermanas polacas y una historia de amor cercada por el abuso y la pasión, en el relato de una sola de sus sobrevivientes. Un film que convocó a Norma Aleandro, que incluso inspiró la animación, Jorge Marrale, Maite Lanata y un gran elenco para prestar el talento a las voces. La animación en blanco y negro es atrapante, efectiva, de gran efecto dramático, con el toque justo del clima policial y violento. Un film singular y creativo, que da gusto disfrutar.
Una historia de amor, venganza, traición y muerte Producida por FS Entertainment, en conjunto con NOMAD Cine, EOK Producciones, y la producción Asociada de MCFLY Studio, ya está en los cines la película animada El paraíso. En la Rosario del siglo pasado, una mafia violenta y terrible asola a la ciudad y a las jóvenes inmigrantes del viejo continente que llegan al país en busca de un futuro prometedor. Esa es la base de la película animada dirigida por Fernando Sirianni y Federico Breser, con guion y producción del primero, basada en la serie Tierra de Rufianes. La calidad de la animación 3D lograda hace honor a la historia que se narra, todo ello en base a la unión de las experiencias de la dupla de realizadores. Las voces de los personajes, en un muy trabajo de interpretación en doblaje, estuvieron a cargo del gran elenco conformado por Norma Aleandro, Nicolás Furtado, Maite Lanata, Jorge Marrale, Alejandro Awada, Cesar Bordon, Juan Scilko, Mariano Chiesa y Ernesto Larresse. Otras participaciones estelares fueron las de Elena Roger, Favio Posca,Juana Viale, Claudio Da Passano, Carlos Kaspar y Marcos Woinskyicago. El paraíso es una gran opción de una película diferente creada a partir de segmentos de la historia de la «Chicago argentina» que logra una minuciosa reconstrucción de ese imaginario.
Con una cuidada producción y la convicción que la animación puede narrar historias más allá de las imaginadas para el público infantil, Fernando Sirianni y Federico Breser presentan El Paraíso, producción animada con grandes voces de actrices y actores nacionales. Estructurada como una épica historia, apoyada en el flashback para desarrollar su trama, la llegada de dos hermanas de Polonia en 1929 al país, y que son trasladadas a Rosario, considerada la Chicago local, disparan una trágica aventura en donde la trata y prostitución de mujeres es sólo el punto de partida del relato.
Historia animada de un romance maldito y violento La película de Fernando Sirianni y Federico Breser cuenta con un riquísimo elenco de voces comandado por Norma Aleandro, Nicolás Furtado y Maite Lanata. Rosario 1926. Magdalena y Anna Scilko arriban a Rosario desde Polonia con la promesa de un nuevo futuro. Engañadas, caen en manos de los Abramov, una organización criminal que maneja la red de prostitución más grande de la ciudad. Así comienza El Paraíso, una película de animación para adultos dirigida por Fernando Sirianni y Federico Breser que no escatima en violencia, muertes y un relato sólido en torno a las clásicas disputas mafiosas con final trágico anunciado. El Paraíso es la historia de amor maldito entre Ian Abramov (Nicolás Furtado), joven miembro del grupo criminal la "Chicago Argentina" atormentado por el asesinato de su padre frente a sus ojos y ciego de ira por ello, y Magdalena Scilko (Norma Aleandro en su ancianidad y Maite Lanata en su juventud), que cae en la red de trata y logra escapar, permitiéndose contar su historia de supervivencia -para dejar testimonio de lo ocurrido antes de su partida- a un periodista (Ernesto Larrese). La cinta, que a su vez está basada en la serie Tierra de rufianes, es de narrativa ágil y descarnada, con elementos del cine noir y un grado no invasivo de melodrama. El Paraíso es una película que va por carriles esperados, sin sorpresas y apelando a algunos eficaces lugares comunes, bien usados para potenciar el drama en las escenas más fuertes. La animación es, por momentos, un tanto defectuosa (pareciese que los personajes se mueven en cámara lenta) y eso habla de las deudas pendientes del cine nacional en torno a los proyectos de este tipo que, en este caso puntual, son muy rescatables. La rebeldía estructural yace en el armado de cada uno de los personajes, llenos de matices y con arcos muy atractivos de seguir. Una producción de estas dimensiones -y en una industria nacional que suele relegar lo animado por cierto temor o tabú- siempre es motivo de interés, y cuando detrás de eso hay una buena historia que merece ser contada la magia sucede. Véala en un cine, pero no se deje engañar por los dibujitos y tenga el decoro de no llevar menores de edad a la sala (o hágalo a conciencia).
Este largometraje de animación en 3D para adultos llega a los cines luego de un proceso de trabajo de cuatro años, en donde Fernando Sirianni y Federico Moreno Breser se dividen créditos de dirección. Adaptado al lenguaje cinematográfico desde la serie en formato web y televisivo “Tierra de Rufianes” (2015), autoría del propio Breser, “El Paraíso” encuentra en su génesis un terreno de exploración fértil para articular, a través de un relato que se ancla en las coordenadas históricas de la Argentina de principios de siglo pasado, más concretamente, en la ciudad de Rosario. Un año y medio de labor de guion demandó a Sirianni este ambicioso proyecto, sin antecedentes en nuestro medio. Para un profesional proveniente del universo del Live Action, y quien ha producido variedad de comerciales, la apuesta se asumía arriesgada. A lo largo de un total de cien minutos de duración, el factor de innovación prima en un producto inédito en Latinoamérica y realizado íntegramente con el motor de render para videojuegos denominado “Unreal Engine”. El blanco y negro surge como declaración de intenciones de una obra que se inspira en el cine noir de pura cepa, al tiempo que, puestas de cámara, modos de narración y montaje son colocados al servicio del clasicismo policial. “El Paraíso” combina elementos genéricos prototípicos, y la magia sensorial de disfrutarlo en una sala a oscuras, en la pantalla grande, se asume como paso obligado. Estrenada en treinta salas comerciales y contando con las voces de destacadísimos intérpretes del medio (Jorge Marrale, Norma Aleandro, Alejandro Awada), esta gran producción animada del cine nacional nos brinda una propuesta estética y conceptualmente sólida.
Rosario, tierra de amor y venganza El cine sobre mafiosos, en este caso traficantes de mujeres y proxenetas del siglo pasado, entre otros negocios, es la referencia inmediata de “El Paraíso”, la película dirigida por Fernando Sirianni y el rosarino Federico Moreno Breser. Rodada en animación 3D, parte en color y parte en blanco y negro, el título hace referencia a un prostíbulo rosarino al que van a parar las protagonistas, Magdalena y Anna Scilko, dos hermanas polacas recién desembarcadas en el puerto de Rosario. Cada una tendrá su destino, pero será Magdalena la que conduzca la trama y con su relato vaya desplegando una historia de explotación, poder, traición, venganza y amor con destino incierto. El film cuenta con un guión sólido, una trama atravesada por giros constantes y suspenso sostenido hasta un final sorprendente que bien podría derivar en una secuela. Basada en la serie animada “Tierra de rufianes”, dirigida por Moreno Breser en 2016, la película sigue a Anna y Magdalena que caen en la red de Los Abramov, la banda dedicada a la explotación de mujeres. La banda está liderada por León, con la voz de Jorge Marrale, bajo cuyo cuidado está su sobrino Ian (Nicolás Furtado), hijo de su hermano asesinado.