Un reencuentro impensado
“El pasado que nos une” (After the wedding, 2019) es una película dramática dirigida y escrita por Bart Freundlich. Remake del filme danés homónimo estrenado en 2006 y dirigido por Susanne Bier, el reparto incluye a Michelle Williams, Julianne Moore, Billy Crudup, Abby Quinn, Alex Esola, Vir Pachisia, Greta Quispe, entre otros. La cinta tuvo se premiere mundial en el Festival de Cine de Sundance.
La historia se centra en Isabel (Michelle Williams), una mujer pacífica que maneja un orfanato en la India y prácticamente crió a Jai (Vir Pachisia), un niño que fue encontrado en la carretera. Al dar hogar a cada vez más chicos, el establecimiento necesita mayor financiación para la educación, alimentos y medicamentos. Desde Nueva York, la empresaria Theresa (Julianne Moore) se comunica con Isabel con el objetivo de ofrecerle millones para que el orfanato pueda salir adelante. Sin embargo, existe una condición: que Isabel viaje hasta Estados Unidos para poder acordar la transacción en persona. Aunque al principio Isabel está renuente por dejar a su comunidad, el pensar en la gran cantidad de dinero por un bien mayor termina convenciéndola para emprender el vuelo. Al conocer a la exitosa Theresa, ésta terminará invitándola a la boda de su hija Grace (Abby Quinn). En la celebración, al ver entre la multitud al marido de Theresa, Isabel deberá enfrentarse a un pasado que ya creía enterrado para siempre.
Mentiras, intenciones ocultas, secretos y un acuerdo no cumplido son algunos de los aspectos que componen a este dramón de relaciones familiares típico para ver un domingo a la tarde por la televisión de cable. Y es que a pesar de que en un comienzo el filme mantiene intrigado al espectador, que busca saber por qué a la protagonista le sorprende tanto ver al marido de la empresaria, pronto las revelaciones se vuelven muy poco emocionantes por culpa de un guión demasiado plano e insulso.
Lejos de emocionar como pretende, la película sale airosa únicamente por la actuación principal y la iluminada fotografía. A Michelle Williams los roles dramáticos le calzan a la perfección y esta no es la excepción. A pesar de que ciertos detalles del pasado de su personaje no están bien explorados, Williams es la que mantiene a flote un filme que luego de sus giros narrativos se transforma en algo bastante básico y olvidable. En cuanto a Julianne Moore, en muchas ocasiones se siente como que la historia debería haber estado contada desde su perspectiva. Al ver los hechos desde el punto de vista de Isabel, la situación que atraviesa Theresa no está abordada de la mejor manera.
Con un final que deja gusto a poco, “El pasado que nos une” se convierte en otra de las tantas remakes sumamente innecesarias que, más que para cine, están diseñadas para la televisión. Seguramente el material original sea mejor opción si se quiere ver una historia sobre relaciones personales.