Presionado por su madre (una relación que roza lo perverso) un adolescente se dedica a entrenar y convertirse en un conjunto de músculos, mientras crece, siente deseos y las presiones lo transforman en una bomba a punto de estallar. Notable debut de Gómez Aparicio, que logra hacer de los cuerpos un auténtico discurso, un campo para el suspenso. Más allá del tema y la historia, ese clima enrarecido es el mayor logro de la película.