"Así se conquista el mundo"
Después del exitoso relanzamiento que tuvo hace un par de años, una de las sagas más icónicas e importantes del séptimo arte vuelve a la pantalla grande para ofrecernos un verdadero espectáculo cinematográfico.
Respetando la base argumental establecida por la correctísima “El planeta de los simios: Revolución”, esta nueva entrega de la franquicia de películas basada en la novela del escritor francés Pierre Boulle es una impecable superproducción que se ubica cómodamente entre lo mejor del año en materia de entretenimiento.
Luego de que el director Rupert Wyatt decidiera dar un paso al costado de este proyecto, fue el realizador Matt Reeves quien, ni más ni menos, agarró la cinta de capitán y se cargó el equipo al hombro para concebir una superproducción que combina de forma perfecta una muy buena historia y efectos especiales de altísimo vuelo técnico.
Con grandes antecedentes dentro del cine apocalíptico y del drama fantástico (la genial “Cloverfield” y la cautivadora remake “Let Me In” respectivamente), Reeves se perfilaba como un gran candidato para hacerse cargo de la dirección de esta secuela. Sin embargo, estábamos muy lejos de esperar semejante resultado que termino siendo no solo superior a su antecesora sino también uno de los mejores blockbusters de los últimos años.
En primer lugar, técnicamente, “El planeta de los simios: Confrontación” es un producto soberbio donde además de los excelsos efectos especiales a cargo de la gente de Weta Digital (responsables del sistema de captura de movimiento que capitalizó por primera vez “Avatar” de James Cameron) sobresalen también la fotografía de Michael Seresin (habitual colaborador del gran Alan Parker) y la soberbia banda sonora del ganador del Oscar Michael Giacchino.
Solo por este aspecto ya vale la pena disfrutar esta propuesta dentro de una sala de cine, que además también aprovecha muy bien el formato 3-D para regalarnos unas magnificas secuencias de acción donde, por lejos, se destaca una tremenda batalla nocturna con munición pesada entre humanos y simios en plena ciudad de San Francisco.
No obstante, lo que consolida a “El planeta de los simios: Confrontación” como un verdadero film de jerarquía es su dinámico, oscuro y emotivo guión que lleva la firma de Marck Bomback (“Duro de Matar 4.0”), Rick Jaffa y su esposa Amanda Silver.
Acompañado con correctas actuaciones de un elenco “humano” muy pequeño conformado por Jason Clarke, Keri Russell y Gary Oldman, la trama de “Confrontación” ofrece muchísimos matices y alegorías sobre la evolución humana y también una simple pero eficaz crítica sobre la falta de respeto ejercida por el hombre sobre la naturaleza y el medio ambiente que está lejísimos de resultar un panfleto aburrido y difícil de digerir.
La sutileza con la que se entremezclan las diferentes realidades de nuestros protagonistas (humanos y simios) es digna de aplausos y realmente logra que el espectador se compenetre con lo que se cuenta a medida que avanza el relato gracias a una certera cuota de verosimilitud.
Para lograr eso nuevamente fue clave el trabajo del grupo de actores encabezado por Andy Serkis, Toby Kebbell y Judy Greer, quienes esta vez interpretaron a los simios del film dotándolos de una humanidad tan realista que emocionan hasta a la mismísima Jane Goodall.
Ahí radica la magia de “El planeta de los simios: Confrontación”, ya que no se trata solo de una película donde los simios hablan y lideran batallas contra la humanidad, sino también de un relato que traspasa la pantalla para cautivar y sensibilizar a todos los espectadores por igual con el accionar de los “malos” de esta historia.
Sin lugar a dudas estamos frente a una de las mejores películas del año que reivindica por completo, y de gran forma, el cine de aventuras fantásticas de excelente calidad dentro de la pantalla grande.