La gran osadía de Matt Reeves en Planeta de los simios: La guerra, como también en el film precedente El planeta de los simios: Confrontación, es haber adoptado la perspectiva de los simios para articular el relato y así avanzar sobre esta ficción evolucionista. Que los simios puedan hablar no responde al característico ademán antropocéntrico por el cual toda criatura viviente no humana se desempeña lingüísticamente solo en los cuentos animados para niños. En El origen del planeta de los simios, que dio inicio al relanzamiento de un viejo clásico de Hollywood inspirado en la novela distópica de Pierre Boulle, la aparición del fenómeno del lenguaje en la evolución de los simios respondía a una situación accidental (que la primera palabra pronunciada por César fuera “no” permitía múltiples lecturas; entre ellas, señalar que esa simple palabra es un organizador simbólico y psíquico ineludible; esto sí podía ser leído como un giro antropocéntrico, pero de una sofisticación inusual en el cine).