Cuando hace un tiempo escuché de la realización de una precuela del “Planeta de los Simios” recuerdo decir: ¿Por qué siguen jodiendo con una saga que tendría que haber quedado en la espectacular película de 1968? En esa primer peli teníamos a un joven Charlton Heston siendo mascota de monos pensantes y poderosos para luego de varias peripecias terminar escapando de su esclavitud y llevándonos con él a uno de los mejores finales de la historia del cine (se cae de maduro , pero no lo cuento para el público joven que no vió la peli. ¡Véanla como sea purretes!)
La película de Rupert Wyatt, nos cuenta como fue la historia desde el principio, en términos “georgeluqueanos” lo que se dice una “precuela”. A diferencia de Tim Burton, que decidió hacer una remake, que si bien aportó muy buenas cosas en materia de diseño, argumentalmente fue una porquería y con un final que el mismísimo Burton tuvo que salir a explicar por cuanto medio pudo.
Will Rodman (James Franco) es un científico que desde hace años estudia un virus que sirva para regenerar la capacidad cognitiva. Todo esto impulsado por su propia historia ya que su padre (John Lithgow), tiene el Mal de Alzheimer. Por supuesto para la prueba de esta investigación, el laboratorio le proporciona simios .A partir de aquí lo que viene se lo imaginan y lo que no… bueno vayan a ver la peli.
Para destacar la interpretación de Andy Serkis , que si bien no le vemos la cara, la captura de sus expresiones y movimientos interpretando a César (el chimpancé) es sublime , Serkins ya realizó grandes trabajos de captura de movimientos en “El Señor de los Anillos” como Gollum o en “King Kong” interpretando al orangután gigante . De los demás actores sólo puedo hablar bien de John Lithgow, ya que James Franco es de madera o tiene un pequeño desorden mental que no le permite hacer las caras que corresponden con lo que tiene que interpretar ( lo vieron en la entrega de los Oscars, algo le pasaba a ese muchacho) .
En cuanto a los efectos de cgi aplicado a los monos, donde me hizo más ruido y no pude dejar de ver una animación fue cuando César era bebé. Me costó mucho no imaginarme a los actores relacionándose con la nada misma en un set, luego la cosa comienza a mejorar o será que la historia logró atraparme y me olvidé que César es una animación.
El film funciona por si mismo, aunque si conocemos la historia de la saga veremos un montón de guiños o de personajes conocidos (simios en este caso) que nos harán disfrutar un poquito más la peli y ni hablar de un gran final que nos explica, todo el futuro de la saga. En definitiva muy entretenida y para pasar un gran rato en el cine.