“El Príncipe de Persia: Las arenas del tiempo” nos presenta al hijo del Rey Sharaman, el Príncipe de Persia, derrotando al todopoderoso Maharajá de la India en una portentosa batalla. Tras la victoria llegó el saqueo de sus posesiones. Y entre ellas se llevaron un par de objetos misteriosos: la daga del tiempo. Además capturaron a la bella hija del Maharajá. Un traidor del reino del Maharahá, y que ayudó al Príncipe en su conquista, engaña a éste para que rompa el misterioso reloj de arena. Desde ese momento se desatarán las temidas "arenas del tiempo". Y la aventura comenzará.
Los orígenes de dicha realización es a base de una saga de videojuegos del género de plataformas iniciada en 1987; aunque sólo se trata de una adaptación y no una réplica exacta.
La historia trascurre a través del joven Príncipe Dastan (Jake Gyllenhaal) un valiente guerrero adoptado por el Rey de Persia cuando apenas era un niño. Llegará misteriosamente a sus manos la daga del tiempo la cual le causará muchos inconvenientes; se le va a adjudicar la muerte de su padre adoptivo y la traición a su reino. Este será el detonante y Dastan tendrá que demostrar su lealtad y todos los valores aprendidos durante su vida.
Nos encontramos con una excelente ambientación; nos muestran una Persia en donde era una gran Imperio lo cual hace más verosímil la historia. Además de contar con mucha acción, efectos especiales en concreto cuando el joven Príncipe hace uso de la daga del tiempo en donde podemos ver como todo se rebobina en cama lenta para volver a empezar. También hay que destacar las acrobacias del musculoso y buen mozo Dastan cuando salta de muro en muro. Estos movimientos si fueron sacados exactamente del videojuego.
Tal vez el “Príncipe de Persia: ...” dentro de unos años va a ser olvidada por los espectadores, pero no quita que sea una buena realización para que grandes y chicos pasen un buen rato de diversión y aventura en un nuevo mundo maravilloso de Disney.