El regreso de Mary Poppins

Crítica de Isabel Croce - La Prensa

La recordada y original "Mary Poppins" interpretada por Julie Andrewx es de la década del "60. Logró trece nominaciones al Oscar, entre ellos a la famosa canción "Chim Chim Cheree". Por supuesto que este regreso no será tan nominado pero trae también un mensaje de felicidad, auténtica ingenuidad y el encanto de una nueva protagonista.

Si aquel filme se desarrollaba en la Londres edwardiana de 1910, este lo hace 24 años después, durante la Depresión del "30. Los personajes están unidos por lazos de parentesco, también son Banks. El joven Michael trabaja en el mismo banco en el que trabajaba su padre, y sigue viviendo en la misma casa con sus tres niños, Annabel, John y Georgie, y su ama de llaves Elllen (la divertida Julie Walters). La enfermedad se llevó a su esposa y la niñera Mary Poppins (Emily Blunt) aparece mágicamentes desde el cielo traída por un cometa familiar y dispuesta a proteger a la familia y darles un baño de creatividad. El filme se detiene en el estado de insatisfacción y angustia de todos luego de la muerte de la madre. Incluso en el padre, que dejó sus inquietudes artísticas para dedicarse a un rutinario empleo bancario que no impide que estén al borde del desalojo.

Apoyados por la hermana de Michael, que defiende los derechos laborales, la familia intenta superar su angustia pero la presencia de la Maga o Bruja Poppins logrará lo imposible. Ella sabe cómo despertar esperanzas cantando, como les dice a los niños ante la ausencia de la madre: "Nada se ha ido para siempre, sólo cambió de lugar".

MUSICA Y ANIMACION

Con una cuota de optimismo, con las bellas secuencias compartidas por actores en vivo y animados (la escena del tazón mágico), con una excelente coreografía y vestuario, el filme conserva su encanto, al que agrega el efervescente encuentro con la prima de Poppins, Topsy, una excéntrica mentalista interpretada por la polifacética Meryl Streep.

Escenas como las de la plaza (la vendedora de globo es Angela Lansbury, gran actriz de 92 años, integrante de aquella "Mary Poppins") o la aventura submarina en la bañera, deslumbran.

Esta Mary Poppins mantiene la magia de hacer a los vecinos volar llevados por globos y dar unos pasos de baile a Dick Van Dyck, el intérprete original, también de 92 años y ahora devenido en presidente retirado del Banco.

Una secuela donde aquel deshollinador ahora convertido en farolero (el dúctil Lin-Manuel Miranda) sigue ocupándose de una ciudad de juguete a la que Mary Poppins decide visitar una vez más.