"El regreso de Mary Poppins", dirigida por Rob Marshall, es la secuela de la memorable película de 1964 considerada como la obra cumbre de la carrera de Walt Disney.
Desde el primer minuto el film te sumerge, con una narrativa muy parecida a la original, en el mágico mundo de Poppins haciéndola parecer una prolongación de la cinta dirigida por Robert Stevenson.
Emily Blunt está espléndida en su rol y se adueña del personaje haciéndonos olvidar de la ausencia de Julie Andrews. A su lado está el talentoso Lin-Manuel Miranda que, con su carisma y energía a la hora de realizar los imponentes números musicales, completa una dupla protagonista al nivel de su predecesora.
Las canciones se adaptan muy bien y siguen la misma línea de la original. Lamentablemente, en una primera impresión, no son tan pegadizas como "Supercalifragilisticoexpialidoso" o "Con un poco de azúcar", pero quizás es solo cuestión de tiempo para que se hagan de un lugar en nuestro subconsciente.
En definitiva, Mary Poppins sí que está de vuelta y trae magia, color, música, recuerdos y lecciones de vida para las nuevas y viejas generaciones.
Por Matías Villanueva