Una familia de monos que vive en las ruinas antiguas en las junglas de Asia del Sur Polonnaruwa con otros animales asiáticos, juntos en gran aventura.
Este documental cuenta con la voz en off de la comediante Tina Fey (“Chicas pesadas”) y muestra una familia de macacos que habitan en las ruinas sagradas, un lugar lleno de leyendas y mitos en la pintoresca selva de Sri Lanka, ellos como tantas otras especies se encuentran en peligro de extinción.
Para darle una mayor animación a la historia se le da un nombre a estos monos, está la hembra Maya que tiene un rostro dulce y tierno y es la heroína, tiene a su bebé Kip que tiene unos ojos grandes, un grito chillón, depende de su madre y siempre se encuentra junto a ella. Este grupo de monos convive con otros animales, sufren las distintas condiciones climáticas y otras vicisitudes. Buscan sus alimentos y los peligros de la selva acechan, como los depredadores, entre otros.
Estos monos al igual que otros nadan para buscar mejores alimentos debajo del agua y después de una fuerte lluvia pueden encontrar exquisitas plantas. Pero el peligro puede venir por el lado del lagarto, cuya arma letal es la sorpresa, y que utiliza cuando necesita comer. Ese es el momento justo en que Maya, buscando alimentos al igual que otros, entre la huida para salvar su vida pierde a su pequeña cría, quien se encuentra acechado por el peligro. Pero después de la tensión llega el momento alegre luego de una intensa búsqueda y muchas peripecias ambos sobreviven y vuelven a reunirse.
Kumar es un mono macho, el padre del pequeño Kip, que viene para quedarse y a sociabilizar con el resto, hasta que llega otro grupo de monos y atacan a todos estos que habitan en esas ruinas. En esa lucha pierden a uno de sus compañeros y esta banda se apoderan del lugar y quienes están desde un principio son expulsados. Ahora deberán buscar otro lugar. La historia toma otro cuerpo, se exponen a otras eventualidades y se encuentra con la peor especie que son los humanos. Una vez allí realizan una serie de travesuras: roban todo tipo de comida y desordenan todos los lugares que transitan. Se encuentran molestos entre los ruidos y las antenas de comunicación pueden ser como las ramas de un árbol para intentar descansar un rato, también allí juegan y esto forma parte de su diversión, con estas imágenes ofrecen momentos muy animados a los espectadores.
Pero no soportaran mucho tiempo allí y una vez finalizada su experiencia deciden regresar a su habita y hacer valer sus derechos, estos se cargan de valentía, se enfrentan a todos los obstáculos y vuelven con una gran fuerza para recuperar su castillo entre las rocas.
El film cuenta con primerísimos planos de: su destreza, coreografías maravillosas, están los momentos que se lo ve: dormir, comer y jugar, la convivencia con: ardilla, una mangosta, y un perro, entre otros animales. Muchas otras especies se ven en este documental pero la mayor atracción es la simpatía de los monos con todas las actividades que realizan, todo el film se
encuentra acompañado con la estupenda música del compositor inglés Harry Gregson-Williams (“Armageddon “; “Cowboys & Aliens”; “Las crónicas de Narnia - el Príncipe Caspan”;…). Dentro de los créditos finales se ve quienes filmaron este documental y hay que destacar que incluyen pocas situaciones dramáticas, todo se envuelve mayormente con imágenes atractivas para deleitar a la platea.