Para admirar la técnica y luego leer el cuento
Cuando una buena viejecita se enferma, las plantas de su jardín se ponen tristes, las luciérnagas le escriben saludos, el grillo le toca serenatas para animarla, y alguien, de pronto, piensa en los Hombres Hoja. "Ellos pueden ayudar cuando pasa algo así. Pero la Reina Araña niega su existencia. Ella es la mala de este cuento infantil de William Joyce originalmente titulado "The Leaf Men and the Brave Good Bugs" (si, también hay pequeños invertebrados buenos y valientes, que se preocupan por las ancianitas).
Lo que ahora vemos se dice inspirado en ese cuento. Sólo que, después que Joyce firmó el contrato, aparecieron cuatro guionistas, uno atrás de otro, y mandaron a la vieja fuera de su casa, al grillo a dar recitales a otro lado, piantaron a la araña, convirtieron el jardín en un bosque, a los Hombre Hoja en un ejército de guerreros verdes en lucha con un ejército de guerreros grises (unos montando colibríes, otros montando murciélagos), metieron una reina con poderes mágicos, un comandante que la protege, una babosa macho, un caracol, un orugo charleta, un sapo artero, un malo de nombre discutible (¡Mandrake!), un científico loco, un perro trípode, una hija adolescente que se hace diminuta y contacta con un adolescente de mente diminuta, etcétera.
En síntesis, del cuento original apenas quedaron las lindas ilustraciones de algunas flores. En cambio se impusieron unas impresionantes batallas entre ambos ejércitos, carreras, persecuciones, el rescate de un capullo mágico capturado por los malos, y otras ágiles situaciones con trasfondo de mitología británica y referencias a la pérdida de seres queridos. Ya cuando se anunció el proyecto los de "Rotten Tomatoes" profetizaron que esto iba a ser como la unión de "Bichos" con "El señor de los anillos", y no se equivocaban.
Por supuesto, la calidad no se discute. Esta obra lleva la firma de Chris Wedge, el director de arte Michael Knapp, y demás gente capaz de los Blue Sky Studios. Y también lleva la firma de William Joyce, que no puede quejarse. El ya conoce el negocio. Participó en la producción de "Robots", es el creador de "Rolie Polie Olie", "A Day with Wilbur Robinson", llevado al cine como "La familia del futuro", y "The Guardians of Childhood", que derivó en "El origen de los guardianes", y todo eso le permite llegar cómodamente a fin de mes. Para obras de clima artístico más personal, ya están sus libros, o el corto que él mismo hizo, con el que ganó el Oscar en su categoría: "The Fantastic Flying Books of Mr. Morris Lessmore". Pero ése es solo para grandes.