Un espectáculo visual y actoral sin parangón, con un guion justo pero que sufre por su extensa duración.
El mexicano Alejandro Gonzalez Iñárritu es uno de los directores más viscerales que hay en la actualidad. Si bien no soy lo que se dice un fanático extremo de su filmografía (eso sí, sus tres primeras películas son impecables), me veo obligado a reconocer que tiene una habilidad visual, una manera de guiar las actuaciones y un modo de que estas confluyan de una manera tal que se nutran mutuamente que es digno de análisis para cualquiera que se anime a esto de hacer cine.
Pero también debo decir que desde que se separo de Guillermo Arriaga, y aunque sus películas se afilaron y superaron tanto en los aspectos visuales como actorales, los guiones de Iñárritu, aunque claros en sus intenciones y estructura, se han vuelto demasiado extensos, demasiado crípticos. El Renacido se aleja de este cripticismo, pero se debilita por una nimiedad.
Todo un Parto
En 1823, Hugh Glass, un cazador furtivo, es parte de una expedición que surca los bosques de Norteamérica en busca de pieles, que esa época eran de muchísimo valor. Tras el ataque de un oso que casi lo mata, ve como uno de sus compañeros mata a su hijo, y lo deja a su suerte. El Renacido es la historia de cómo Glass, debe recuperar el uso de su cuerpo, esquivar a los Indios y sobrellevar la crueldad que la madre naturaleza le echa encima para poder llevar a cabo su venganza.
Si hay algo que no le puedo criticar al guion de El Renacido es que sea poco claro en sus ideas. Es una historia de venganza tremendamente sencilla, con personajes motivados muy claramente y que recurre al dialogo muy esporádicamente, dejando que las imágenes y las acciones hagan todo el trabajo; como debe ser.
Pero lo que si voy a criticar es que se extiende demasiado. Es una historia que no justificaba los miles de flashback esotéricos que posee y no justificaba la extensión de muchas escenas. Pasadas las escenas de acción (el ataque indio del principio y la por todos conocida escena del Oso) el ritmo de la película empieza a reptar como una babosa, empieza a aburrir. No fluye, y es una pena, porque con los elementos visuales y actorales que poseía, una duración menos extensa, y un tratamiento mas directo, sin vueltas y al punto le hubiera beneficiado increíblemente.
Por el costado técnico, ovación de pie, silbidos y vuvuzelas para Emmanuel Lubezki, porque su utilización de la luz natural es magistral. Tanto en el día como en la noche. Su tratamiento visual en esta película es digno de análisis, estudios, imitación, etc. porque la nitidez y claridad que consiguió el famoso “Chivo” en absolutamente toda la película es de una extrema riqueza.
Por el nivel actoral, la pregunta del millón es ¿Cómo esta Leonardo DiCaprio? Lectores, se los pongo así: Si a DiCaprio no le dan el Oscar, seria la mayor injusticia de la vida. Ninguno de los otros cuatro nominados se expuso una onza de lo que tuvo que sufrir este hombre para dar una interpretación conmovedora. Se salió a miles de kilómetros de su zona de confort, desafiando su mente y su cuerpo para un papel que en muchas ocasiones no le permitía usar la palabra. Este hombre no solo se empujo hasta el límite, lo paso a tal punto que es un pelito, un punto.
Ahora, si somos justos, aunque la actuación de DiCaprio es meritoria y merecedora de todos los premios que se le pueda dar, Tom Hardy no se queda para nada atrás. Su Fitzgerald es tan simple como lo es complejo y tan violento como lo es racional. Uno de los mejores papeles de un actor que sigue creciendo.
Conclusión
El titulo local de El Renacido le viene de perlas a esta película porque su extensión la hace, sinceramente, un parto. Un ritmo que desafía al extremo la paciencia del espectador; una lentitud innecesaria para una historia que no tiene tantos rebusques.
Si querés ver una buena narración, con ritmo y fluidez, te podes desilusionar. Pero si querés ver unas visuales impresionantes, esta es tu película. Si querés ver a DiCaprio hacer el compromiso más extremo que puede hacer un actor para con su profesión y ver como lo borda como un verdadero maestro, esta es tu película.