Un policial con trama ilógica
Un grupo de ladrones con rigurosa formación militar se propone robar una fortuna de la Reserva Federal de Los Ángeles, donde diariamente se desechan cientos de millones de billetes usados. Pero, en el medio de sus complejos planes, un durísmo policía políticamente incorrecto los tiene en la mira. El típico juego del gato y el ratón es el centro de esta película que tiene dos protagonistas que no logran generar empatía con el espectador, no tanto por las actuaciones de los correctos Gerard Butler (el policía) y Pablo Schreiber (el ladrón), sino más bien por el guión del director Christian Gudegast, que no logra volver demasiado interesantes a estos personajes, que parecen salidos de alguna versión clase B de los Pacino y De Niro de "Fuego contra fuego" de Michael Mann.
"El robo perfecto" empieza con una sólida y fuerte escena de robo a un camión blindado, y luego desperdicia más de la mitad de sus excesivas dos horas y veinte de duración en la absurda relación de sus dos antihéroes. Hay que soportar giros de la trama ilógicos e innecesarios, pero a medida que se concreta el robo las cosas mejoran, culminando en una excelente escena de tiroteo en medio del tráfico de una autopista que casi redime este mediano policial negro.