La llegada de un extraño y la modificación de los comportamientos de un grupo de mujeres a partir de esto, es tan sólo el disparador de un relato atrapante y tenso, remake de una película de 1971 de Don Siegel.
Coppola maneja con maestría el suspenso y dirige a un elenco impecable de actrices (Kidman, Dunst, Fanning, etc.) que ofrecen, además, la pasión necesaria por ese recién llegado (Colin Farrell), el sostén de esta claustrofóbica, y bella a la vez, narración y su razón de ser.