Dibujo elemental y diversión modesta
Información para niños: éste no será un dibujo animado de esos que se recuerdan toda la vida, pero van a pasar el rato. Información para grandes: este dibujo tiene la ventaja de venir sin merchandising agregado, lo cual es un ahorro. Y de tomarse todo en solfa, lo que ya es costumbre. Por ejemplo, al cumpleaños de 18 de la Bella Durmiente Antes de Dormirse llega Blancanieves en limusina, de vestido por arriba de las rodillas, contonéandose entre sus enanitos. Y la cumpleañera ya tiene un novio secreto, plebeyo pero limpito (y medio pavote porque hay que protegerlo y hasta rescatarlo de las manos y los labios del hada maligna, que es mala y fría como el hielo pero está bastante atendible). Ah,no, aclaremos que simplemente es pura broma. Pero de humor alemán.
En la producción se juntan Boris Aljinovic y otros pícaros que ya hicieron con actores reales "7 enanos" y "7 enanos. La continuación", dos guarradas más o menos civilizadas y más o menos graciosas que pueden verse por Youtube, y contratan al más trabajador Harald Siepermann, que, luego de trabajar en varios dibujos de los sellos Amblin y Disney, participó en el desarrollo visual de "Encantada" y entró en la animación germana haciendo los caracteres adicionales de "Till Eulenspiegel". Suyos son los méritos visuales en este caso, incluyendo algunas cabecitas redondeadas y sonrosadas tipo muñequito de tapón de botella (estilo antiguo, cuando esos muñequitos eran de madera). Suyas también son algunas figuras propias de historieta infantil, y la imitación berreta pero simpática del dragón y otros bichos.
Del resto de la compañía son, en cambio, los chistes viejos, las canciones sin mayor gracia, y la entretenida historia del enanito tontón que pone a todo el reino en problemas, pero al final se aviva y se convierte en el héroe de la fiesta. Quizá las canciones suenen mejor en su idioma original. Si el lector la encuentra, tendrá un interesante bonus: la bruja Dellamorta es interpretada por Nina Hagen (lo mismo, la versión en inglés). Hechas estas salvedades, y aceptando que a la larga todos los personajes resultan simpáticos, como se ve, no les hemos mentido a los niños: se pasa el rato.