"SPIDERMAN (RE)INICIA"
"¡Otra vez sopa!", como se diría en el barrio. A 5 años de la última aparición cinematográfica del héroe arácnido de Sam Raimi, “The Amazing Spider-Man” inicia un rebooteo demasiado pronto. Estamos nuevamente ante la historia de Peter Parker, un estudiante de secundaria que fue dejado por sus padres cuando era niño, a cargo de su tío Ben y su tía May, y luego fallecen misteriosamente.
Peter trata de averiguar quién es y qué quiere llegar a ser y, a su vez, está encontrando su camino con su primer amor de secundaria, Gwen Stacy.
Cuando Peter halla un oculto maletín que perteneció a su padre, inicia una investigación para entender la desaparición de sus padres, una búsqueda que le lleva directamente a Oscorp, el laboratorio del Dr Curt Connors, ex-compañero de trabajo de su padre.
El nuevo “Spiderman” está protagonizado por Andrew Garfield, Emma Stone, Rhys Ifans, Denis Leary, Campbell Scott, Irrfan Khan, e incluye a dos grandes del cine como Martin Sheen y Sally Field como los tíos de Peter. La película ha sido dirigida por Marc Webb (responsable de la comedia “500 días con ella”).
Peter es un chico parecido a cualquiera de su edad, un tipo común y corriente, al que le cuesta relacionarse con las chicas, que no es ni popular, ni rico, ni poderoso como otros superhéroes; sencillamente es uno más, alguien con quien resulta más fácil identificarse. Es por ello que los acercamientos con el personaje de Emma Stone resultan de lo más placentero del filme, amén de las atractivas instancias de acción. Ambos jóvenes actores producen una interesante química en pantalla, mostrándose vulnerables y algo retraídos uno con el otro, lo que hace más cautivadora su relación. Andrew Garfield resulta un significativo acierto en el casting; y Stone, mucho más.
La ciudad de Nueva York siempre ha sido un componente clave de la historia de Spiderman y eso es especialmente cierto en la visión de Webb para The Amazing Spiderman. Los exteriores del filme se rodaron en su mayoría en los sets de las calles neoyorquinas de Universal Studios, y se construyó a escala real una sección del puente de 91 metros para preparar una de las mejores secuencias de acción, en la que aparece el villano como un rabioso reptil gigante y varios vehículos en problemas.
La película resulta muy entretenida, a pesar de los 136 minutos, y presenta un estilo visual que mezcla con gran naturalidad el alucinante trabajo de escenas especiales con la animación por computadora, con una integración fluida de ambas en dos amplios entornos digitales. El guion se toma su tiempo hasta la primera aparición del Hombre Araña (digamos una hora, como mínimo), por lo que la versión 3D no tiene el mejor aprovechamiento visual en todo ese largo prólogo.
Hasta que los estudios lo hagan oficial, lo que es seguro es que por lo menos habrá una segunda entrega que llegará a los cines en mayo del 2014. Incluso en los títulos de crédito se nos muestra una escena que deja abierto el filme a más continuaciones. A la espera, entonces...