Regreso triunfal con onda verde
Todo vuelve en materia cinematográfica y el superhéroe arácnido no es la excepción. Esta cuarta aventura cambia de protagonista (Andrew Garfield en lugar de Tobey Maguire) y también de director (afuera quedó Sam Raimi y ahora es Marc Webb), pero el espíritu del comic de Marvel está presente en cada fotograma.
El sorprendente hombre araña hace honor a su título con una historia que comienza de cero, desarrolla correctamente los personajes centrales y hasta espera la hora de proyección para que haga su aparición triunfal el superhéroe en cuestión encarnado por el actor de La red social.
Si la intención de Marc Webb (500 días con ella) fue dotar a sus criaturas de conflictos personales y familiares lo logra a partir del guión de James Vanderbilt (el mismo de la inminente Robocop), sin olvidarse del costado espectacular del relato.
Peter Parker es abandonado de niño por sus padres, dos agentes secretos, quienes lo dejan en manos de sus tíos (Sally Field y Martin Sheen) y la película retrata su transformación de estudiante enamorado (esta vez de Emma Stone, la actriz de Tierra de zombies e Historias cruzadas) a superhéroe luego de ser mordido por una araña expuesta a la radiación. La trama incluye al ex.compañero de trabajo de su padre, el Dr. Curt Connors (Rhys Ifans), quien está experimentando con la metamorfosis de lagartos.
La historia dispara telarañas hacia varias puntas y ofrece entretenimiento puro (la secuencia del puente colgante) que crece, al igual que los poderes del protagonista, en la segunda mitad del film.
El tema de la doble identidad, el enfrentamiento con criminales de poca monta y el motor de la venganza se encienden en este regreso triunfal con un 3D que aporta algunas tomas de atrapante resolución en las alturas. La aparición de la criatura monstruosa (como en las películas japonesas a las que se refiere el jefe de policía interpretado por Denis Leary) amenaza con destruír la ciudad y continúa la onda de "El duente verde" de las realizaciones anteriores.