Este tipo de personajes casi siempre le caen bien al protagonista Vin Diesel (su mirada ruda, musculoso contundentes y su voz grave) y acá una vez más el director (“Sahara”) sabe aprovechar esto. Llena de buenos efectos especiales, el film se da ciertos lujos como tener en el elenco Michael Caine, un diferente Elijah Wood, entre otros. Sin demasiadas sorpresas, con flojas actuaciones y guión, se puede sortear con un buen balde de pochoclos, una buena sala y se puede disfrutar una historia sin demasiadas pretensiones.