Dudas de una burguesa
Anne (Juliette Binoche) es una burguesa parisina que escribe para una revista y aborda el tema de la prostitución en el ámbito universitario. Cuando la mujer comienza a investigar las vidas de dos jovencitas que encontraron un modo expeditivo para financiar sus estudios, descubre que la actividad no tiene los ribetes escandalosos de otros tiempos. El tema —que no es ajeno a ninguna de las sociedades occidentales contemporáneas— perturba mucho más a la periodista que a sus protagonistas, al punto de que la mujer verá temblar su sólida estructura de vida. Como una mujer con una vida matrimonial que no está exenta de los problemas que debe enfrentar una pareja madura, el descubrimiento más terrible para la periodista se produce cuando advierte que las jóvenes que viven del comercio de su cuerpo no se consideran víctimas de nada y, al contrario, admiten que lo que hacen es un modo más de permitirse una vida que no lograrían con otro tipo de trabajo. Una película que permite que Juliette Binoche siga convenciendo como actriz con los papeles que aborda y que exhibe algunas escenas verdaderamente fuertes, que pueden herir alguna susceptibilidad. Una manera inteligente de afrontar un problema que las sociedades netamente consumistas toman demasiado a la ligera.