Laura Salvador y Laura Rubio, las "Lauris", son dos madres que no se conocían cuando decidieron adoptar hace una decena de años. El destino las fue acercando cuando ambas comenzaron a ayudar a otras personas que pretendían saber cómo funcionaba la adopción y las dificultades de un sistema que parecía no tener en cuenta sus deseos y prioridades. A partir de sus intercambios, el film expone cómo las Lauris desarrollan una vocación de servicio para luchar contra la desinformación y soledad con las que son destratados los postulantes. En consecuencia, organizan foros y encuentros para contener las genuinas inquietudes de aquellas personas que desean construir una familia a través de la adopción y también de las que ya lo han hecho. En forma simultánea, el documental presenta diferentes regiones del país, donde se debaten distintas posturas frente a la adopción. Asimismo, registra la creación, de manera independiente y espontánea, de grupos de autogestión que intentan dar voz a los postulantes frente a un sistema que pareciera no escucharlos. De igual modo, expone las conflictivas temáticas con las que se enfrentan los efectores del sistema.