Todos sus muertos
Adrien Brody protagoniza Ellos vienen por ti (Backtrack, 2015), una cinta que tiene todos los clichés del género y se vuelve nebulosa cuando busca el golpe de efecto en el espectador descuidando la narración.
Peter Bower es un psiquiatra que acaba de perder a su hija en un accidente. Mientras su esposa pasa los días en la cama hundida en la depresión, él se apoya en su trabajo y ve desfilar día tras día a sus atribulados pacientes. Con la ayuda de su mentor, interpretado por Sam Neill llega a una conclusión increíble pero previsible: todos sus pacientes están muertos.
Además de traerle un claro perjuicio económico, este hecho sobrenatural tiene su anclaje en un hecho del pasado que deberá revelar a lo largo de la cinta. Michael Petroni, guionista de El Rito (The Rite, 2011) y Ladrona de libros (The Book Thief, 2013) escribió y dirigió Ellos vienen por ti con Sexto sentido (The Sixth Sense, 1999) y Los otros (The Other, 2001) como horizonte.
Mientras los muertos- pacientes se presentan como personas comunes y corrientes en cuanto su aspecto, el otro fantasma que lo acecha y lo hace pensar en su pasado es la típica criatura fantasmal de pelos negros enrevesados que podía haber salido de Ringu (1998), Mamá (Mama, 2013) o decenas de películas del género.
Petroni, aunque con ciertas licencias, desarrolla una historia de suspenso bien llevada pero cae en varios lugares comunes cuado elige mostrar secuencias de puertas que se abren solas o hamacas fantasmales sin tener en cuenta que lo que queda fuera de campo causa más terror que aquello que se muestra. El bebé de Rosemary (Rosemary´s baby, 1968) es una muestra perfecta de esto.
Ellos vienen por ti podría haber sido una película de suspenso como lo fue Sexto sentido pero el director se dejó seducir por ciertos recursos que han desfilado frente a la lente miles de veces y que el espectador ya conoce de memoria.