Emma

Crítica de Paraná Sendrós - Ámbito Financiero

Buen cine de sentimientos

Siempre en constante búsqueda como director y productor de obras ajenas, Juan Pablo Martínez se prueba aquí en una obra intimista, de escasos componentes y diálogos aún más escasos. Trabajo de veras independiente, sin ningún subsidio del Incaa, con un equipo de apenas ocho técnicos, filmada de a poco en las afueras de Rio Turbio, la orilla del mar y la catedral de Cracovia, éste es un cine de sentimientos descriptos mayormente a través de la imagen, los silencios, y el rostro hermoso y reservado de la protagonista.

Ella es Sofía Rangone, actriz de teatro musical que aquí, paradójicamente, apenas dice una palabra. Pero la dice con una luz en el rostro que es como una declaración completa de felicidad. Bien, porque antes la vimos en esa etapa terrible que la gente tiene cuando se van perdiendo las esperanzas y ya pesan demasiado la soledad y las necesidades jóvenes. A modo de espejo, consuelo y contrapeso, Germán Palacios juega con ella unas escenas de marcada sutileza. Faltaría, quizás, un par de tomas intermedias que ayuden a hilvanar ciertas reacciones, pero la intención del autor es hacer que el propio público vaya deduciendo y completando la historia. O las historias, porque a cierta altura cambia el escenario y surgen otros personajes, con otros conflictos. Imprescindibles, Federico Travi, música, Adrián Lorenzo, fotografía, Javier Favot, montaje, y Valentina Dariomerlo, arte.