Con la cartelera tapada de remakes y tanques de Hollywood, “En los 90” es un bienvenido oasis. Se trata del debut como director de Jonah Hill, el gran actor que se hizo conocido en comedias como “Superbad” y “Comando especial”, y que fue nominado al Oscar como actor de reparto por “Moneyball” y “El lobo de Wall Street”. A los 35 años, Hill decidió dar el salto a la dirección con un filme áspero y a la vez sensible que se ubica en la mejor tradición del cine de iniciación adolescente. La historia se ubica en Los Angeles (en la parte menos glamorosa de la ciudad), en 1995. Allí está Stevie (interpretado por el pequeño Sunny Suljic, toda una revelación), un chico de 13 años que vive con su joven madre y un hermano bastante mayor que lo agrede constantemente. Esta agresión se advierte ya desde la potente primera escena, y será el disparador para que Stevie busque un lugar que identifique como propio fuera de su casa.
En apenas 85 minutos, el director mostrará el arco de transformación del protagonista: su tímido acercamiento a un grupo de skaters algo marginales, los ritos de aceptación del grupo y sus primeros coqueteos con el alcohol, las drogas y el sexo. El registro es casi minimalista, sin moralinas ni golpes bajos. Y se agudiza en los momentos en que el entusiasmo desbordado de la adolescencia se da de cara con el descontrol y el peligro. La banda de sonido (firmada por el gran Trent Reznor) incluye grupos emblemáticos de la época como Pixies, Nirvana, Cypress Hill y Wu-Tang Clan. Y para el recuerdo queda esa escena del protagonista y su mejor amigo andando en patineta al atardecer, mientras de fondo suena Morrissey cantando “We’ll Let You Know”.