Cuando el año parece estar culminando llega a los cines Entre navajas y secretos (Knives Out), la nueva pelíucla de Rian Jonhson que reune a un gran elenco con actores de varias generaciones en un policial de enredos y suspenso que sabe combinar el estilo Agatha Christie con humor.
La trama gira en torno a la misteriosa muerte de Harlan Thrombey (Christopher Plummer), un exitoso y millonario novelista, justo en la noche de su cumpleaños número 85. Es tal el misterio que desencadena esta muerte que todos sus exéntricos familiares tienen motivos para ser sospechosos del crimen: su hija Linda (Jamie Lee Curtis) quiere heredar la mansión, su yerno Richard (Don Johnson) oculta una infidelidad que Harlan conoce, su otro hijo Walter (Michael Shannon) desea mantener el legado familiar dirigiendo la editorial, su nuera Joni (Toni Collette) desea recibir dinero para la “educación” de su hija luego del fallecimiento de su esposo y también está su nieto Ransom (Chris Evans) con quien sabemos, discutió fuertemente esa noche.
A partir de allí, dos policías, Elliott (LaKeith Stanfield) y Wagner (Noah Segan), junto con la ayuda de un meticuloso y también exténtrico detective privado llamado Benoit Blanc (Daniel Craig), se encargarán de entrevistar a su extensa familia para encontrar al culpable, ayudados con las declaraciones de Marta (Ana de Armas) la enferemera de Harlan y la única con una coartada.
La película está narrada de una forma no lineal, con idas y vueltas, trazando un paralelismo con los enredos de la trama. De hecho, a la mitad de la película ya conocemos la verdad del crimen, pero esto no hará mas que generar nuevas incognitas y varios momentos gloriosos. Poco hay para decir de las actuaciones de un elenco de todos actores consagrados, que van desde quienes triunfaron en los 80s como Jamie Lee Curtis y Don Johnson, hasta más contemporaneos y en puro pico de sus carreras como Chris Evans, así como también aquellos que de apoco están comenzando a marcar su nombre en como Ana de Armas, quien se carga gran parte de la película junto a Daniel Craig.
Además de ser una gran película de suspenso con muchos toques de comedia, también funciona como una crítica social hacia la clase aristocrática, retradados acá como una familia exentrica, un tanto ignorante que solo les importa sus intereses a contraposición de la “servidumbre”, representada por Marta, que solo queire hacer su trabajo y proteger a su familia.
La película que Johnson (criticados por algunos por dirigir The Last Jedi y el episodio de la mosca en Breaking Bad) dfirigió y escribió, tiene varios momentos inverosimiles llevados hasta el extremo -como uno en particular que involucra el vómito- y algunos giros extraños sobre el final. Gags que en cualquier otra película se la podría críticar pero que acá no hace más que seguir unas relgas del juego planteadas por el director y que alimentan a esta joyita que -con sus licencias- homenajea a lo mejor del cine policial ysin que nadie la llamara, se coloca entre las mejores del año.