Whodunnit o ¿Quién lo hizo? es un tipo de narración popularizado por autoras como Agatha Christie. En sus transposiciones cinematográficas siempre plantearon escenarios elegantes y una galería de personajes de lo más variopinto. En este contexto se adentra Rian Johnson para aportar una mirada contemporánea a este particular subgénero literario y cinematográfico con Entre Navajas y Secretos.
Más Allá del Misterio
Entre Navajas y Secretos ofrece una fluida y estructurada narrativa de misterio que sucumbe no pocas veces al humor, y aun no menos veces al políticamente incorrecto. Dicha trama es llevada por personajes con idiosincrasias claramente marcadas y todas al servicio -ya sea a favor o en contra- de la temática que plantea la película: la de hacerse a uno mismo más allá de los medios que puede ofrecer su familia.
Es precisamente cómo desarrolla esta temática lo que hace de su condición de Whodunnit solo un detalle superficial, que ayuda a poner a los espectadores en los asientos.
Lo que en realidad hace Entre Navajas y Secretos es llevar el concepto más allá. Es decir, del Whodunnit (¿Quién lo hizo?) hacia el Whydunnit (¿Por qué lo hizo?). Este aspecto es el que ayuda a que película cale más hondo en nuestra apreciación de los personajes y en ese terrible defecto de carácter que es la codicia, la cual puede ser desvergonzadamente expuesta o pudorosamente oculta, pero plantea que al final del día todos la tenemos. Porque esa codicia esta apuntada hacia lo material y lo material da poder, y si hay algo que atemoriza a los miembros de esta familia es el hecho de que alguien a quien ellos consideran inferior tenga más poder que ellos. Una señora mojada de oreja a ciertas actitudes xenófobas que tristemente imperan en la actualidad.
Por desgracia, estos detalles trajeron como consecuencia un defecto que contribuye a que la película alargue su bienvenida más de lo usual. Una contra que si bien puede quitarle puntos no mancha lo que -como un todo- es una narración muy lograda.
En materia visual, Entre Navajas y Secretos tiene un exquisito trabajo de cámara y montaje que siempre encuentra maneras innovadoras de rodar el clásico interrogatorio entre el detective y los sospechosos, lo que sumado al trazo escénico registrado por los mismos, da la riqueza de puesta en escena que hace destacar al film. Todo apoyado por un diseño de producción que remite indudablemente a los clásicos del subgénero en el que se inscribe.
En materia actoral, el variado ensamble interpretativo consigue destacar, teniendo grandes momentos Jamie Lee Curtis, Toni Collette, Christopher Plummer y Chris Evans. Sin embargo, los que se llevan la película al hombro son definitivamente Ana de Armas, como la enfermera de la víctima, y Daniel Craig, como un astuto investigador privado. Si Rian Johnson es inteligente le creará más de una aventura después de está.