¿Quién dijo que una película de fórmula probada y muy repetida no puede ser una gran película? Si todos los ingredientes están donde deben estar, sino falta nada, y todo está en su justa medida, podemos estar ante un claro exponente de género como mínimo bien logrado, y si además encontramos guiños, estrellas de otrora éxito bien utilizadas y una realización envidiable, podemos decir que sí, Escape Imposible es un típico film de género que no sorprende, pero igualmente es una gran película.
El protagonista es Ray Breslin (Silvestre Stallone) un hombre con un trabajo complicado, cobra millones de dólares para hacerse pasar por preso y así probar la seguridad de las cárceles escapándose, así como leyeron el hombre es como un catador de cárceles.
A él y a su equipo de logística les llega una oferta irrenunciable, ingresar a “La Cueva”, una cárcel pensada para albergar a los criminales más peligrosos del mundo, con la mayor seguridad y vigilancia, y en punto del planeta desconocido.
Las cosas arrancan mal desde el primer momento, otro preso es asesinado por un guardia en el traslado y cuando Ray intente utilizar un código para dar terminada su labor, el alguacil Willard Hobbes (Jim Caviezel) se lo negará; por lo que ahora escapar ya no es un trabajo sino una necesidad de vida o muerte.
Ya dentro de la prisión Ray conoce a Emil Rottmayer (Arnold Schwarzenegger) quien también lo busca a él para poder idear un plan de escape. Las cartas están servidas, que empiece la acción. Son varias las cartas que tiene a su favor Escape Imposible, la más importante, no reposarse cómodamente en su gancho de audiencia, los dos veteranos héroes de acción.
Esta historia de Miles Chapman y Jasón Séller da la sensación que también pudo ser un buen film en manos de actores menos conocidos; aunque sí, el dúo Sly-Arnold le suma y mucho desde el carisma y los constantes guiños a los films de su carrera que serán ampliamente celebrados por la platea.
Si bien la historia no presenta gran originalidad, se las ingenia para recordar otros films memorables y darles su propio toque. Lo primero en lo que uno piensa es en la serie Prison Break, y es verdad hay mucho que nos hará acordar; pero también estan por ahí Fuga de Alcatraz, Condena Brutal (con el propio Sly), La Fortaleza y Fuga de Absolon (aunque esta se basaba más en la Ciencia-Ficción).
escape
Más aún, rescata cierto espíritu de desparpajo/incoherencia clase B de estas dos últimas, con un humor constante, guardiacárceles enmascarados cual Stormtroopers, y un villano con tics caricaturescos.
Otro gran acierto es haber puesto a Mikael Håfström en la dirección, el sueco es de los pocos que ha demostrado saber moverse en el género que le toque, ya se trate de suspenso (descarrilados), terror (1408), drama policial (Shangai), o hasta films de exorcismos (El rito, que si no es buena es por el guión que juega en contra a la lograda parte técnica).
Håfström maneja las cosas con nervio, buen ritmo, mucha tensión y una fotografía cuidada, la sensación laberíntica de “La Cueva” es toda gracias a él, logra convertir una de acción en un plus de suspenso. Escape Imposible lo tiene todo, una historia entretenida y muy bien llevada, grandes actores de género (a los que hay que sumarles a Vinnie Jones, Vincent D’Onofrio, y Samk Nelly), y toda la acción pochoclera que uno busca cuando ve este tipo de película.
Por fin, después de varios intentos, el dúo de acción encuentra un título que nada tiene que deber a sus mejores títulos de épocas pasadas, Escape Imposible se ubica ahí, en el panteón de las mejores.