Otra más de Hugh Grant
Keith Michaels (Hugh Grant) es un guionista que luego de ganar un Oscar en 1998 no ha vuelto a pegar otro éxito, ha ido de un proyecto a otro hasta que a falta de trabajo y de dinero acepta un puesto de profesor en una pequeña universidad. Sin ganas, pero sin muchas opciones, deja Los Angeles para mudarse a un pequeño y frío pueblo al norte de Nueva York. La vida universitaria no lo atrae demasiado, no toma en serio su trabajo ni a sus compañeros, pero con el tiempo las expectativas y la energía de sus alumnos despiertan en él algo parecido a las ganas de enseñar, y al estar frente a la clase vuelve a conectarse con su juventud, sus recuerdos y aquello que lo motivó a escribir historias, antes de que la fama lo desviara de su camino. Marc Lawrence escribe y dirige nuevamente una comedia romántica -otra más en su lista- y al igual que en "Music and Lyrics" lo hace con Hugh Grant como protagonista, en un papel que ya ha hecho varias veces, pero que es el que mejor le sale, el de galán canchero que muestra su lado sensible cuando se enamora. El actor es el centro de esta historia, está en todas las escenas, tiene los mejores diálogos y la gracia suficiente para llevar adelante toda la historia. No sucede lo mismo con Marisa Tomei, su personaje de alumna cuarentona y positiva es bastante estereotipado y no despierta demasiada empatía, por lo que varios personajes secundarios terminan siendo mucho más interesantes que el de la protagonista femenina, como por ejemplo la estricta profesora fan de Jane Austin que interpreta Allison Janney, el solitario profesor de literatura que interpreta Chris Elliot, o el tímido alumno que intrerpreta Steven Kaplan, quien para sorpresa de su profesor resulta un brillante guionista. "Escribiendo de amor" es una comedia romántica de fórmula, con mucho humor, acertados toques de ironía en los que se burla de los estereotipos universitarios, linda música y moderados momentos emotivos, todo correctamente dirigido para pasar un buen rato.