A veces las remakes sirven para mejorar una obra original.
Esto no sucede muy a menudo, pero cada tanto surgen casos de este tipo.
Epidemia, remake de The Crazies, de George Romero, es un caso reciente elocuente.
La nueva versión con todas las cosas que se le pueden criticar superó a la original en varios aspectos, que ya de por sí era una película de medio pelo.
Sin embargo, a veces hay casos donde las remakes son un espejo de la obra original y no se pueden hacer milagros.
Escupiré sobre tu tumba fue una película malísima de 1978, dirigida por Meir Zarchi, que en su momento generó un escándalo tremendo por las escenas de sexo y violencia que tenía la historia.
Hasta el día de hoy no termino de entender que tiene que ver con el género de terror filmar de manera morbosa la violación de una mujer y su posterior predecible venganza sangrienta.
En ese momento, cuando se estrenó, este tipo de propuestas que se conocían con el nombre de “exploitation films”, eran bastante populares y habían surgido a partir del furor que generó en 1972, The Last House on the Left , de Wes Craven que tuvo una influencia real e importante en cine de terror.
Escupiré sobre tu tumba simplemente trató de llamar la atención con escenas fuertes y nada más. La película fue muy criticada por la prensa en general por considerar que glorificaba la violencia contra la mujer, un argumento, por cierto, que es imposible de refutar.
Esta remake que se estrena esta semana no ofrece un panorama distinto de lo que fue la versión de 1978.
Los actores, esto lo tengo que reconocer, son un poco más decentes, pero después es la misma bosta que hace 30 años con un envase diferente.
De todas maneras, creo que películas como estas tienen su público que las consideran grandes obras de terror porque entienden que el género sólo pasa por filmar secuencias de violencia extrema con grandes galones de sangre.
Lo vimos hace poco con El juego del terror, película pedorrísima, que sin embargo tuvo sus adeptos, pero porque buscaban justamente entretenerse con ese tipo de propuestas.
Hasta el episodio más flojo de Saw, que fue una serie sangrienta, tenía una estructura argumental más sólida que Escupiré sobre tu tumba, que de tan predecible que es, termina siendo tonta y aburrida.
La versión original todavía era más enferma, ya que la protagonista luego de haber sido brutalmente violada, volvía a utilizar sus cuerpo para seducir nuevamente a los agresores con el fin de vengarse de ellos.
En la remake, por razones que no tienen explicación, la actriz principal luego de ser atacada reaparece como la hija que podrían haber tenido la asesina Nikita y Jigsaw.
Es claro que en esta remake el director Steven Monroe intentó levantar la apuesta en materia de morbo y violencia con una película mediocre que no tiene mucho que ofrecer salvo por ese tipo de escenas.
Pero bueno, los que se entretengan con violaciones y mutilaciones de todo tipo supongo que tienen la propuesta adecuada para ir al cine.
El género de terror quedará pendiente para la próxima