Un corto periodo de tiempo para el reencuentro de muchos conflictos que el espectador deberá adivinar, participando atentamente a cada gesto, a cada pequeño secreto que se desliza. Una cantante que trabaja en restoranes, es acuciada para que pague una deuda en un plazo corto. Esa mujer regresa de Brasil hacia su Misiones natal, en un barrio periférico donde todos se conocen, se vigilan y le reclaman cuentas pendientes.. Entre sigilos y observaciones se habla de una estafa, de un dinero que no aparece, de enojos y amenazas. Pero la médula del film es el encuentro entre una madre y una hija con una relación marcada por la distancia, de necesidades mutuas, de sororidad y buenos instintos. De cierta magia acotada pero bien lograda. Miss Bolivia, la personal y única María Paz Ferreyra debuta en labores actores aportando su presencia magnética secundada por Irina Missisco y Laura Kramer. Una mirada de la directora y guionista Mara Pescio que no juzga pero profundiza, que no señala pero muestra desde la codicia a las pequeñas miserias.