Hace un tiempito ví el último trabajo de Tarsem Singh ("Inmortales") y más allá de que era una pochoclera clásica, percibí que el hombre tenía oficio para contar historias en escenarios mágicos e irreales. Si bien yo no lo hubiese elegido para dirigir "Mirror mirror", lo cierto es que es un tipo capaz de darle cierta impronta a sus relatos que ciertamente atrae público. Eso si, era una apuesta fuerte. El 1ro de junio abre otra versión de la mismo clásico cuento llamado "Snow White", a secas. La contienda está declarada...
Advertencia: lo primero que hay que hacer cuando uno se prepara para esta nueva versión de "Blancanieves", es tener en cuenta que aquí nada debe tomarse muy en serio. No es el tiempo de heroínas pasivas, que esperan que su príncipe las rescate y haga todo el gasto solito. Digamos que hoy en día, las chicas son más desenvueltas, tienen mucho para decir y Nieves, no escapa a este signo de los tiempos. No esperen tampoco que los secundarios respeten la tradición al estilo Disney porque ellos también se han aggiornado a la posmodernidad (ya verán el porqué!), lo que sí podemos decir que se mantiene es, la aparición de los elementos tradicionales que son característicos en la legendaria trama. No más que eso.
"Mirror mirror" es la historia de una reina bastante perversa y con cierto sentido ácido del humor, (jugada por Julia Roberts) y la guerra desatada que hace para sacarse de encima a una rival peligrosa, su hijastra (Lily Collins, la hija del gran Phil!!!) quien la enfrenta por el amor de un príncipe (Armie Hammer). Hay en el medio una lucha de poder instalada que tiene tintes económicos (y, el déficit de caja se hace notar cuando algunas mujeres dirigen países no?) y todo el encanto habitual que este tipo de historias trae a través del color que aportan sus personajes. La soberana del reino (el rey desapareció misteriosamente en un bosque) tiene una obsesión con la belleza y por mantenerla, es capaz de todo, así que en cuanto Nieves se interponga entre ella y su último deseo (desposarse con un príncipe español), seremos testigo de su loca furia en otra divertida composición de la Roberts.
Lo primero que hay que decir es que esta es la última película que hizo la famosa diseñadora de vestuario Eiko Ishioka (ganadora del Oscar por Drácula) y su mano en los trajes es digno de destacar: muchos de ellos sorprenden, sobre todo los que giran sobre la fantasía animal. Los fastuosos vestidos que usa la realeza son increíbles, es una pena que ya no esté entre nosotros tamaña figura (falleció en enero). La dirección de arte cumple un sólido trabajo y recrea un atmósfera (aunque el CGI parezca muy simple) a tono con el relato, brindando el marco necesario para que los protagonistas desplieguen su repertorio a la hora de entretener.
Los secundarios son deliciosos, los enanitos (entre quienes se lucen Joe Gnoffo y Mario Povinelli) y el mayordomo jugado por Nathan Lane hacen lo suyo con oficio. Y la película entretiene. No es un film que amerite grandes debates, sino simplemente una adaptación moderna de un clásico de los cuentos de hadas. Quienes tienen que disfrutarla más, son los chicos. Y si bien ellos se pierden bastantes gags (sobre todo en la versión doblada), lo cierto es que hay que reconocer que es un producto bien hecho.
Si, seguramente nos hubiese gustado una Roberts un poco más salvaje, una Collins menos estereotipada y dulce y un Hammer que realmente aporte algo más que sus pectorales, pero no... Y todo bien. Pasa.
"Espejito espejito" es una película liviana pero entretenida. Cumple.
Mención especial para el cuadro final a lo Bollywood, así que no se vayan de la sala cuando la historia termine.