Eliza Capai es periodista y documentalista. Formada en la ECA/USP, ha dedicado su carrera a trabajar especialmente cuestiones de género, cultura y sociedad en más de 25 países para diversos medios brasileños e internacionales. Su búsqueda nos remite a la esencia del cine de denuncia carioca. En épocas de grandes cambios y revoluciones, a comienzos de los años ’50, el Cinema Novo fue la piedra angular de un movimiento estético, social y político que cambiaría el rumbo cinematográfico de su país, quien por entonces se disputaba el trono de potencia latinoamericana junto a México y Argentina. El Cinema Novo surge de la búsqueda de un lenguaje cinematográfico propio para el cine brasileño, capaz de reflejar los fuertes problemas sociales y humanos que el país sufría. En la búsqueda por afirmar un cine verdaderamente nacional y popular se criticaba la representación que se hacía del pueblo.
En este sentido, y rescatando el legado de esa toma de conciencia, “Revuelta” se posiciona como un loable cine que visibiliza luchas de igualdades de género y derechos civiles. Esta documentalista brasileña busca entender que estamos viviendo, dar voz a los desfavorecidos por el sistema. Nos muestra a estudiantes tomando las escuelas en San Pablo en 2015, y ve en ese acto rebelde una esperanza de futuro para unos jóvenes que tienen el coraje de luchar por una sociedad igualitaria, pugnando por los derechos que otorga la democracia y solicitando una educación de calidad. A lo largo de 5 años, rastrea este movimiento de lucha y toma de escuelas, justificando esta postura para entender que es lo que sueñan y como ideológicamente, estos jóvenes se plantean un mundo igualitario, una educación pública digna.
Sus recuerdos del Brasil más conservador, buscando criminalizar movimientos sociales a través del Estado y las fuerzas militares que van en contra de los activistas, reviven en este presente que estigmatiza a aquellos que buscan, ni más ni menos, que se aplique la constitución, siendo repelidos con violencia. Salir a la calle significa la indefensión ante el sistema que corrompe derechos -como ha visibilizado el cine carioca en películas más reciente como Tropa de Elite, un escuadrón parapolicial-, pero también la conciencia de estar en democracia y luchar para mejorar esa sociedad.
Igualdad de genero y la finalización de la segregación racial son algunas de las búsquedas de este movimiento estudiantil. La realizadora identifica esa voz que busca la representatividad. ¿Quién va a contar esa historia? La película tiene tres narradores que proveen versiones intrínsecas a la película misma. Tres locutores nos cuentan acerca de esta conciencia de autonomía y derechos. Los documentalistas se colocaron dentro de las protestas y luchas por la reorganización social. Así, busca llegar a un publico joven, como enseñanza para que aprendan las nuevas generaciones sobre lo que ocurrió y reflexionen acerca de que depara el futuro, empatizando en estas revueltas y búsquedas sobre una fundada nueva sociedad.