Los guardianes de Zhao.
¡Sorpresa! Marvel patea el tablero, y de la mano de la recientemente galardonada directora Chloé Zhao (Nomadland, Oscar Mejor Película 2020), saca a la luz un producto que busca cambiar con el continuo esquema que hasta el momento nos tenía acostumbrados. Y con cambiar el esquema me refiero a que, a medida que los minutos vayan pasando, podremos apreciar cómo la mano de la realizadora irá tiñendo con diálogo y desarrollo apropiado, un género que se encontraba arraigado a una estructura lineal que como nada ofrecía, nada emocionaba.
En esta película se presentan ante nosotros Los Eternos, unos superhéroes que estuvieron desde la creación del universo bajo el único propósito de servir como guardianes de los seres humanos contra la amenaza de los “Desviantes”, unos depredadores letales. Es así como estos seres superiores, han presenciado siglos de la historia humana siendo testigos de diferentes guerras y conflictos que fueron moldeando el mundo moderno, hasta llegar al presente.
Tras la eliminación total de los Desviantes, y golpeados por la crueldad humana, el grupo, quien se encontraba liderado por Ajak (Salma Hayek) se divide por diferentes partes del planeta para poder adaptarse a una vida entre humanos; y por supuesto que será el regreso de estas criaturas, el argumento principal para que vuelvan a reunirse.
Eternals es una película que toca los cimientos del UCM: intenta sumergirse en su creación y como son las reglas que rigen en el mismo a través de una historia que siempre debe jugar con la consigna de tener que adecuarse a cierto público. Es justamente por ello, que la película desde un principio cuenta con una cierta carga de “riesgo” al intentar adaptar todo lo que tiene del material original en los comics.
A medida que corran los minutos, se nos presentará ante nosotros un producto que entiende de desarrollo; que sabe cómo hilvanar elementos históricos para que la trama mantenga siempre cierta cuota de misterio al ir desencadenando cada conflicto. Esto lo consigue con cortes directos al pasado en donde no solo conocemos aún más a los personajes, sino que vamos desentrañando cuál era en realidad su misión en la tierra. La película se luce al momento de integrar un aura policial a este género que siempre fue directo y sobre todo, conocido por el golpe por golpe.
En Eternals, si bien no escasean las escenas de acción, hay una presencia mayor de diálogo; dialogo que no cae en la trampa de ser explicativo o grandilocuente, sino que realiza la tarea fina de ir conformando una historia que además de dar conclusión a una trama específica y dificultosa, debe también sortear por momentos de comedia que, increíblemente, no decaen con el clímax del film.
Aun así, no todo lo que brilla es oro. Si bien Eternals es arriesgada y propone algo diferente (al fin), deja algunos huecos narrativos que molestan, y por ende termina conformando una película que, en la búsqueda de cumplir con todas sus pretensiones, le terminará debiendo a los espectadores alguna que otra respuesta.
Si bien por momentos la información se desordena y ciertas conclusiones terminan forzadas, Eternals se conforma con ser un film interesante y diferente en donde la mano de la directora logra destacarse con aplomo y personalidad. No es la mejor película de la mega productora, pero también está lejos de ser la peor.