Épica pura, la cinta es un deleite para los sentidos. CHRISTIAN BALE, nos ofrece un MOISÉS alejado de las estampitas! Humano, piadoso y terrorífico a la vez. Su caracterización es monumental. Algo similar ocurre con JOEL EDGERTON en la piel del faraón, en una transformación física y psíquica admirable.
Visualmente imponente, SCOTT firma esta cinta plagada de escenas de alto impacto, una historia que pese a nunca perder las fuentes bíblicas se permite elaborar teorías terrenales para cada uno de los sucesos fantásticos que la componen. En la línea del mejor cine épico clásico, entretenimiento puro que nos devuelve lo mejor de un género único. Una epopeya fílmica que sacudirá a cada uno de los espectadores.