Expediente trunco
Mucho ya se ha hablado del crecimiento del cine de género y aunque hace unos años era impensado que un joven director realice su ópera prima, en este caso Brian Maya dirige Expediente Santiso.
Salvador Santiso (Carlos Belloso) es un prestigioso corresponsal de un diario porteño que, en compañía de su mujer (Leonora Balcarce) y su hija (Lourdes Mansilla), viaja a Irak para cubrir la invasión de Estados Unidos a ese país en 2003. Luego de un confuso episodio la pequeña desaparece y es dada por muerta. Santiso se niega a aceptarlo y como consecuencia, es encerrado en un psiquiátrico, del que sale diez años después dispuesto a averiguar lo que pasó con su hija y recomponer su matrimonio.
Esta trama se empieza a extender cuando unos sucesos históricos de la Segunda Guerra Mundial están relacionados con la desaparición de la niña, el único que cree ver una relación es el propio Santiso y su cordura será puesta a prueba cada vez más.
A pesar de que tiene todos los elementos para crear una historia entretenida, falla y no logra mantener la historia en su cauce sino confundir más y más. Otro de los errores es que los personajes no logran transmitir nada, hacen evidente una falta de carisma y se hace imposible empatizar con ellos, poco usual en actores como Belloso, Balcarce y Saccone que siempre son correctos aunque no brillen.
Tal vez sean los diálogos que no ayudaron a desacartonar a los personajes ya que son uno de los puntos más débiles del guion.