Extraordinario

Crítica de Fernando Alvarez - Clarín

Con la mirada en la luna
La historia, que era proclive al golpe bajo, está bien equilibrada y respaldada por un convincente elenco.

Las películas sobre niños con problemas físicos tuvieron en ocasiones resultados dispares y el título que se viene a la mente es Máscara, protagonizada por Cher en 1985 y bajo las órdenes de Peter Bogdanovich. El mayor riesgo es caer en golpes bajos, pero este filme de corte familiar está bien balanceado y se deja ver con entusiasmo.

Auggie (Jacob Tremblay, el joven actor de La habitación) es un niño que nació con malformaciones faciales producidas por un desorden genético, y fue educado entre cuatro paredes. Su madre Isabel (Julia Roberts) se ocupa de su tesis, del hogar y lucha contra la tecnología, el padre Nate (Owen Wilson) aporta la cuota de humor necesaria para seguir adelante, y la hermana adolescente Via (Izavela Vidovic) siente que perdió la atención que necesita de los mayores. Ahora es el momento de ir al quinto grado del colegio local y Auggie debe enfrentar al mundo.

Con un casco de astronauta que lo protege de la “amenaza” exterior y la cabeza baja, el niño escapa de una realidad feroz gracias a su frondosa imaginación, colocada en la luna, las estrellas y en sus personajes favoritos de La guerra de las galaxias, que se hacen presentes en el instituto a través de un recurso que se repite y pierde eficacia sobre el final.

La película, basada en la novela de R.J Palacio, está estructurada en cuatro capítulos que llevan el nombre de los personajes y ofrecen su punto de vista sobre la vida de August en el ámbito familiar y educativo. Resulta un acierto del guión que la mirada esperanzadora y redentora no sólo se pose sobre Auggie sino también sobre el resto de los personajes que dan batalla, cada uno a su manera, contra una realidad hostil.

El realizador de Las ventajas de ser invisible, Stephen Chobsky, se rodea de un elenco infantil sin fisuras que se pone la película al hombro, desde el pequeño protagonista oculto tras el maquillaje, el mejor amigo de Auggie, Jack Will, encarnado por Noah Jupe, y el severo rector, rol a cargo de Mandy Patinkin.

Peleas, romance interracial y el viaje de un héroe que cambia las vidas de todos es motivo suficiente como para acercarse al cine.