La sagrada familia
A esta altura de las circunstancias fílmicas, De Niro filma con piloto automático, es decir "se pone la gorra y sale" como se decía antaño de aquellos actores que no necesitaban componer personaje sino hacer un estandarizado rol. Eso ocurre a menudo, salvo cuando de tanto en tanto le sale un guión y personaje acorde, por ejemplo "El lado luminoso de la vida". En el resto de lo último: "Tiempo de caza", "Ultimo viaje a Las Vegas", "Ajuste de cuentas" -que se estrena en estos días-, el gran actor de "Taxi Driver" y "Toro salvaje"...sale con fritas.
Aquí es un padre de familia que debe huir a la costa francesa con toda su familia -perro incluido-, cambiando de nombre y zafando del exterminio que le quiere hacer una organización criminal. Aclaremos que antes ha sido un terrible mafioso y al denunciar a otros pares enfrentados, ha recibido su "protección de testigo".
Luc Besson, ayudado por la producción de Martin Scorsese ha montado una historia que navega entre la comedia de situaciones, el triller y el "film-noir", con algunos momentos logrados y otros no tanto, entonces es cuando la película no sabe bien para donde agarrar,esto se aprecia cuando los hijos de la familia juegan sus cosas, tampoco se aprovecha algo atractivo como el personaje de la madre (Michelle Pfeiffer remándola estupendamente) y así. Por ello la propuesta no termina de redondear, y existe un desaprovechamiento general que alcanza al papel que hace Tommy Lee Jones. Una lástima: tres formidables actores a quienes no se les termina de sacar el jugo, una historia que de a ratos hay que pegarla con alfileres para que no se caiga por completo y el director Besson que nunca nos gustó, y por lo visto, seguirá asi. Apenas un discreto entretenimiento.