El tabu del "perro"
Estrenada en Locarno y en la Competencia Latinoamericana del 29 Festival Internacional de Cine de Mar del Plata, Favula (2014) es una apuesta interesante pero que se agota a los pocos minutos de metraje ante la reiteración de los dispositivos visuales a los que recurre. Peso a eso tiene algunos puntos interesante.
Protagonizada por Natalia Ozán, Nix Noise, Sergio Boggio y Sara Navarro, Favula está filmada en un blanco y negro opaco y sucede en la década del 80 dentro de un bosque creado con una maqueta y a través del procedimiento de retro-proyección o "back proyecting". La historia indescriptible es bastante confusa debido al surrealismo elegido para narrarla.
Con muchas similitudes a Tabu (2011), la obra cumbre del portugués Miguel Gomes, Perrone recurre a elementos básicos del cine, tal vez los más primitivos, pero que un punto se suma a la moda impuesta por la ganadora del Oscar El Artista (The Artist) (2011) o la española Blancanieves (2011), películas que al igual que ésta emularon al origen del cine y cuya única diferencia en cuanto a su concepción es lo económico.
Más allá de las similitudes, copias y demás en Favula se pueden rescatar algunos elementos como el impacto visual de sus primeros diez minutos, en donde Perrone trabaja las imágenes como capas que se superponen a través de fundidos y que son acompañadas por una banda sonora en continúo crescendo. Fórmula que a medida que pasan los minutos se vuelve reiterativa y que sumada a una historia confusa hace que la película decaiga.