El revés del mundo
Feriado (2014), ópera prima del ecuatoriano Diego Araujo, es una película de iniciación donde un adolescente se enfrentará a su homosexualidad, pero con la particularidad de estar enmarcada dentro de un contexto sociopolítico particular como lo fue la crisis económica de 1999.
Ecuador 1999. En medio de la crisis económica que azota al país se declara el conocido “Feriado Bancario”. Juampi (Juan Manuel Arregui), un chico de clase acomodada pasará ese fin de semana en el campo con sus primos. Pero no será un fin de semana como cualquiera porque Juampi conocerá a Pablo (Andrés Paredes), un muchacho quichua mayor que él que lo movilizará sexualmente.
Feriado, estrenada en el último festival de Berlín dentro del apartado Generation, donde también participaron las nacionales Atlántida (2014) y Ciencias Naturales (2014), hace foco en el conflicto de la búsqueda de la identidad sexual pero dentro de un contexto diferente al que muchas veces se recurre. Araujo plantea la historia en un momento de desestabilización económica y pone de protagonistas a dos personajes, de clases sociales opuestas muy marcadas, afectados de manera directa o indirecta por la misma.
En la historia hay una permanente lucha de clases donde los ricos ejercen el poder sobre los pobres, pero también una lucha de poder, de fuertes sobre débiles. No en el sentido físico de la palabra sino en un sentido mucho más amplio. Donde la opresión no es sólo económica y social sino también mental.
Más allá de la historia de amor que la película plantea también resulta interesante el contexto dentro del que se encuadra, como también el punto de vista elegido para mostrar lo que sucedía a finales del siglo pasado en Ecuador. Y será el punto de un adolescente que se está enfrentando no solo a una elección sexual diferente sino también a una situación económica y familiar que se desmorona.
Diego Araujo expone todos los conflictos con un rigor narrativo poco frecuente, pero además sin la necesidad de ser explicito para crear tensión. Todo gracias a un guión sin fisuras y un casting de jóvenes actores que hacen de sus personajes seres tan naturales como amigables.