Flora no es un canto a la vida

Crítica de Rolando Gallego - Lúdico y memorioso

Documental sobre la vida y la muerte, el debut en largometraje de Iair Said registra los últimos momentos de Flora, una acumuladora compulsiva que intenta conectarse con el mundo a través de objetos inservibles, comida y lamentos. El director trasciende el patetismo con el que se podría haber mostrado la decadencia del ser humano, el paso del tiempo, los vínculos, reflotando con su humor característico, la necesidad de vincularnos y ver en el otro su necesidad de evadir la soledad.